Take-Two Interactive entabló una demanda contra re3 project, un grupo de 14 desarrolladores que consiguieron el código fuente de Grand Theft Auto III y Grand Theft Auto: Vice City con ingeniería inversa.

De acuerdo a la demanda que fue presentada en el Distrito Norte de California, Take-Two busca “detener la actividades del grupo de personas que han buscado ilegalmente copiar, adaptar y distribuir al público el código fuente infractor para (esos) dos títulos clásicos de GTA sin la autorización o consentimiento de Take-Two”.

En ese sentido, la compañía pretende que se establezca una orden judicial preliminar contra los responsables de re3 project. Es decir que, a la espera del juicio con jurado al que espera llegar Take-Two, la empresa detrás del GTA también quiere que la justicia ordene que los encargados de re3 project detengan sus actividades con esos populares títulos.

re3 project comenzó en 2018 y se ha mantenido hasta la fecha apuntando que al obtener el código fuente de Grand Theft Auto III y Grand Theft Auto: Vice City mediante ingeniería inversa y requerir que los jugadores ya tengan una copia de los juegos, esta propuesta no incurría en un terreno ilegal. No obstante, Take-Two alega que los responsables de este proyecto “tergiversaron materialmente la legalidad de su contenido, aparentemente alegando que debido a que supuestamente realizaron ‘ingeniería inversa’ en el código fuente de los juegos, de alguna manera no responsables de las infracciones de derechos de autor”.

Pero quizás lo más llamativo de la demanda de Take-Two es que la compañía apunta directamente contra la opción que ofrece re3 para jugar Grand Theft Auto III y Grand Theft Auto: Vice City en Nintendo Switch. “Los Demandados afirman que su código fuente derivado de GTA permite a los jugadores instalar y ejecutar los juegos en múltiples plataformas de, incluidas aquellas en las que los Juegos nunca se han lanzado, como PlayStation Vita y Nintendo Switch”, dice la demanda.

Por supuesto, ese reclamo no deja de ser llamativo ante los recientes reportes sobre los planes para el lanzamiento de ambos juegos en la consola híbrida de Nintendo. Después de todo, aunque aún no hay nada oficial respecto a esos planes, aquella coincidencia de propuestas ciertamente podría impulsar una acción legal de este tipo.