La red social argentina Taringa, reconocida por alojar contenido creado por sus propios usuarios anónimos desde hace más de dos décadas, llegará a su fin.
La plataforma, que logró gran éxito a comienzos de la década pasada, anunció que bajará su cortina el próximo 24 de marzo debido a que el negocio que comenzó como la creación de un estudiante de Buenos Aires ya no era viable.
“Con el cambio de tendencias de los últimos años respecto a las redes sociales, taringa! diseñó un producto que buscaba lo que otras plataformas no podían lograr, un espacio de libertad donde se pueda monetizar el contenido. Sin embargo, debido a las condiciones del mercado y la competitividad de las redes sociales, este sueño se ha frustrado”, explicaron a través de un comunicado.
“20 años de historia no es un logro del que cualquier sitio, plataforma o comunidad pueda presumir, ni de lejos”, agregaron en su despedida. “Taringa! ha sido el lugar de fantásticas historias, memes, trolleadas, inteligencia colectiva por doquier, pero sobre todo, siempre ha sido un lugar donde la libertad de expresión está presente”, enfatizaron.
Levantando a la bandera del “taringuero”, también remarcaron que su hogar logró albergar a “todo tipo de historias, todo tipo de personajes, todo tipo de sentimientos”.
La historia de Taringa estuvo marcada por múltiples controversias, como los problemas de derechos de autor y descargas de contenido pirata que los llevaron a enfrentarse a la viuda de Jorge Luis Borges, pero en el comunicado final dejaron en claro que siempre libraron. “Nos hemos metido en muchos líos y los hemos superado todos”, explicaron.
“Gracias por todo, taringueros. Lo que logramos juntos en estos 20 años quedará en la historia del internet para siempre”, finalizó el mensaje de la plataforma.
