Cuando Disney comenzó su nueva era de películas de Star Wars en 2015, la casa de Mickey Mouse quedó con los bolsillos llenos y cuentas alegres gracias a The Force Awakens. Sin embargo, todo cambió en menos de cinco años.

De acuerdo a Deadline, luego de su estreno en diciembre de 2019, Star Wars: The Rise of Skywalker cerró la nueva trilogía de la franquicia con el margen de ganancias más bajo para Disney.

El Episodio 9 de la franquicia espacial tuvo un costo de producción de $275 millones de dólares y costos globales totales de $627 millones de dólares. Esas cifras no parecen tan elevadas en contraste con los $259 millones de dólares de producción y $776,5 millones de dólares globales que tuvo The Force Awakens y los $200 millones de dólares de producción y $578,3 millones de dólares globales de The Last Jedi. Sin embargo, el punto crítico para Disney está en el margen de ganancias.

Pese a que The Rise of Skywalker recaudó $1.074 millones de dólares a nivel mundial, la película solo dejó ganancias netas por $300 millones de dólares para la compañía. Tengan en cuenta que The Last Jedi reportó $417,5 millones de dólares por el mismo concepto y The Force Awakens le dio $780,11 millones de dólares en ganancias netas al estudio.

De hecho, aunque está fuera de la nueva trilogía, Rogue One: A Star Wars Story consiguió ganancias netas por $319.6 millones de dólares.

Así, en la nueva era de películas de Star Wars amparadas por Disney, el Episodio 9 solo ostenta más ganancias netas que Solo. Pero claro, esa no es una tarea muy difícil porque ese spin-off perdió cerca de $77 millones de dólares en ese concepto.

¿Cómo impactará esto al futuro de Star Wars? Aún no lo sabemos porque los planes para el futuro de la franquicia en el cine se mantienen en reserva y por ahora parece que las novedades de una galaxia muy, muy lejana llegarán desde la televisión y en particular desde las series de Disney Plus.