La era de Elon Musk a cargo de Twitter recién está comenzando, pero las polémicas en torno a su gestión y planes no han tardado en acumularse.

Concretamente esta semana Plataformer y The Verge revelaron que Musk planea introducir significativos cambios a uno de los sellos de Twitter: las cuentas verificadas.

Sin importar si pasan mucho tiempo o no en Twitter es probable que sepan que las cuentas verificadas son todo un sello en la red social y es que el ticket azul que se presenta junto a los perfiles de cantantes, políticos, actores, reporteros y otras personalidades muchas veces es una herramienta útil para discernir en primera instancia de dónde viene una información.

Pero aunque las cuentas verificadas son parte de la propuesta de Twitter, su desempeño e implementación no ha estado libre de complicaciones y durante los últimos años la red social ha experimentado dificultades para mejorar su implementación y alcance.

No obstante, aunque una reforma a las cuentas verificadas parece algo necesario para el futuro de Twitter, Musk tendría en la mira algo bastante radical al respecto y no planearía reinventar el sistema, sino que añadiría un factor de pago a lo que ya existe.

Según explica The Verge, el plan de Musk consistiría en vincular a Twitter Blue - la suscripción que actualmente cuesta más de $4 dólares mensuales- y las cuentas verificadas.

Así, Twitter buscaría “cobrar $19.99 dólares por la nueva suscripción a Twitter Blue” y esa membresía sería necesaria para obtener o mantener el ticket azul en una cuenta. Todo mientras que “los usuarios verificados tendrían 90 días para suscribirse o perderían su marca de verificación azul”.

Ese decir, si quieren conservar u obtener una verificación en su cuenta tendrían que pagar.

Hasta la redacción de esta nota, Twitter no se ha pronunciado oficialmente por este potencial cambio, pero Musk señaló que efectivamente quiere modifcar ese aspecto de la plataforma.

“Todo el proceso de verificación se está renovando en este momento”, indicó el empresario en un tweet.

De hecho, The Verge dice que Musk no aceptaría que no se concreten estas modificaciones y los empleados involucrados en el proyecto tendrían hasta el 7 de noviembre para lanzar la función o serían despedidos.