Además de la polémica en torno a la escena que involucra a Rudolph Giuliani, abogado personal de Donald Trump, otro incidente asociado al estreno de la secuela de Borat tuvo relación con una secuencia entre el falso periodista y una sobreviviente del Holocausto llamada Judith Dim Evans.
Algunos de los familiares de la mujer, quien falleció antes del estreno de la película, demandó a Sacha Baron Cohen, la producción de Borat 2 y la plataforma de Amazon justo antes del estreno.
Su alegato apuntó a que Dim Evans participó sin saber que estaba involucrándose en una sátira. Más aún, reclamaban que todo fue hecho para “burlarse del Holocausto y la cultura judía”.
Pero ahora Deadline ha dado a conocer que la demanda fue desestimada por el juez Kevin Farmer del condado Fulton de Georgia, apuntando a varios defectos como parte de la reclamación.
“La demanda fue desestimada, sin condiciones. La demanda terminó. Sacha Baron Cohen estuvo profundamente agradecido por la oportunidad de trabajar con Judith Dim Evans, cuya compasión y coraje como sobreviviente del Holocausto ha tocado el corazón de millones de personajes que han visto la película”, declaró el abogado Rossell Smith, representante de Amazon.
“La vida de Judith es una una poderosa reprimenda para aquellos que niegan el Holocausto, y con esta película y su activismo, Sacha Baron Cohen continuará su defensa para combatir la negación del Holocausto en todo el mundo”, agregó.
En la película, Borat comienza a sufrir tras tener conocimiento de que en Facebook se niega la existencia del Holocausto, lo que en su natal Kazajistán celebran como parte de un antisemitismo que establece a los judíos como demonios.
Una vez que su hija se aleja, Borat busca “suicidarse” asistiendo hasta una sinagoga. Ahí el periodista entra en contacto con Judith Dim Evans, quien de forma afectuosa le explica que sus ideas sobre los judíos son falsas y también le habla sobre el Holocausto. Borat se alegra por las razones equivocadas, pero a partir de ahí deja su antisemitismo e inclusive termina cambiando las cosas en Kazajistán.
Por eso los realizadores esperaban que, una vez que los demandante vieran la película, se diesen cuenta que todo el punto sobre la inclusión de Dim Evans buscaba hacer lo opuesto al negacionismo.
En Deadline remarcan que la película está dedicada a la mujer sobreviviente y, como excepción a su rutina habitual de no revelar nada a las personas que son filmadas, Dim Evans y su amiga fueron informadas sobre el gag y el hecho de que el propio Baron Cohen es judío, por lo que su objetivo era interpretar a un personaje ignorante como medio de educación sobre el Holocausto.
“Los realizadores ayudaron por separado a otros miembros de la familia de Dim Evans a crear un sitio web en su honor, y hemos escuchado que Baron Cohen y Amazon Prime están trabajando en un lugar para que sus escenas cortadas se vean en el streaming”, explican en el portal.
Otro contenido permitiría además que los espectadores de la película escuchen a la mujer contar la historia de lo que le sucedió a su familia durante la Segunda Guerra Mundial.
A continuación pueden ver la escena.