Con solo cuatro años de vida, doce empleados y un juego lanzado hasta el momento, Campo Santo se convirtió en uno de los estudios indies más prometedores de la industria tras el lanzamiento en el año 2016 de Firewatch, un juego narrativo ambientado en los 80 que cosechó un gran éxito comercial y de la crítica.

Todo esto bastó para que Valve, el legendario estudio detrás de sagas como Half Life y portal, anunciara la compra de la compañía, quienes seguirán trabajando en sus proyectos, pero ahora será publicados bajo el sello de la empresa de Gabe Newell.

Valve ya había expresado su deseo de volver al negocio de la creación de juegos, luego de haber dedicado sus últimos años al desarrollo de Dota 2, dejando a sus experiencias en primera persona de lado. La compañía ya había anunciado la creación de Artifact, un juego de cartas basado en el universo de Dota. Ahora su segundo juego será In The Valley of Gods, el título en el que Campo Santo estaba trabajando ahora. Y quien sabe si al final esto significa que por fin podremos soñar con ver Half Life 3.

La esperanza es lo último que se pierde.