Cuando la próxima semana se estrene Dark Phoenix, la franquicia de los X-Men que arrancó en el 2000 se despedirá. Por supuesto, la historia de la saga tiene momentos altos y bajos y otros que fueron fundamentales para su permanencia por más de una década, como X-Men: First Class.
Aquella película de 2011 dirigida por Matthew Vaughn se presentó como una precuela de las anteriores aventuras del equipo mutante, introduciendo a las versiones de Charles Xavier, Mystique y Magneto que hoy protagonizarán Dark Phoenix.
No obstante, en los planes originales del director de Kingsman, el camino de ellos y el resto de los mutantes en esta nueva trilogía era muy distinto.
En conversación con ComingSoon,Vaughn contó que originalmente planeó que First Class fuera la primera entrega de una saga que continuaría con un nuevo Wolverine en la década de 1970 y luego concluiría con una tercera entrega basada en Days of Future Past.
"Mi plan era First Class, después la segunda película era con un nuevo y jóven Wolverine en los '70 para continuar con esos personajes, mi versión de los X-Men. Así ustedes realmente podrían conocerlos a todos. Y mi final iba a ser Days of Future Past", explicó Vaughn. "Esa iba a ser mi tercera (película) donde los reúnes a todos porque ¿Qué es más grande que juntar a (Ian) McKellen y Michael (Fassbender) y (Patrick) Stewart y James (McAvoy)? Cuando terminé el guión de Days of Future Past listo para producirse, lo mire dije, 'De verdad creo que sería divertido escoger a Tom Hardy o alguien para un joven Wolverine y juntarlos a todos al final'".
Sin embargo, nada de eso se concretó porque 20th Century Fox y los responsables de las películas de los X-Men no quisieron seguir con el plan de Vaughn y optaron por adelantar la película de Days of Future Past. Así, la franquicia se despedirá este año con Hugh Jackman, quién colgó las garras en 2017, como su único Wolverine.
"Fox leyó Days of Future Past y dijo '¡Esto es muy bueno!' '¡Lo haremos ahora!' y yo respondí, 'bueno, que harán después. Confíen en mí, no tienen a donde ir'. Y después ellos hicieron Apocalypse y fue como... 'si giras eso habría sido aún mejor'", recordó Vaughn. "Hollywood no entiende los tiempos. Sus ejecutivos manejan a 100 millas por hora mirando por el retrovisor y no entienden por qué chocaron".