En agosto pasado te dimos cuenta de que Aston Martin reviviría el legendario DB5 aparecido en 1964, en la tercera entrega del Agente 007. Esta unidad, que volverá a la vida el próximo año, a más de 50 años de su irrupción, confirma una vez más el vínculo indisoluble entre el famoso personaje de acción y la firma Aston Martin. Ahora, esa relación pasará a la nueva era que vive la industria automotriz, ya que, según reportan medios europeos, James Bond completará sus nuevas aventuras a bordo de un Aston Martin Rapide E totalmente eléctrico.
El primer vehículo 0 emisiones de toda la saga, será el que pilote Daniel Craig, actor que encarnará nuevamente al agente 007 en la entrega 25. La cinta permitirá ver en acción al modelo que hoy solo existe como prototipo. Si alguien cree que esta variante ecológica le quitará acción a la película, está muy equivocado ya que el Rapide E conceptual se mueve gracias a 610 caballos que le permiten un sprint hasta los 100 km/h en cuatro segundos y una recuperación de 80 a 100 km/h en 1,5 segundos. Lanzado en velocidad, empina la aguja hasta los 250 km/h.
El Rapide E que conducirá James Bond está previsto que se fabrique en una partida de 155 unidades, cada una de ellas a razón de 250 mil libras (aterrizado a la moneda nacional, algo así como $ 225 millones).
