10 cosas que no sabías del Ford Mustang eléctrico

Hace unos días el Mustang celebró sus 56 años convertido en el deportivo más vendido del planeta, nada menos, que por quinto año consecutivo. Hito que, sin duda, enorgullece a los de Ford, los cuales hoy alistan los últimos detalles de lo que será su versión a baterías.

Fue en el Salón de los Ángeles de 2019, cuando la firma del óvalo destapó al Mustang Mach-E, el cual sorprendió por ser el primer vehículo eléctrico del fabricante estadounidense. Entonces, se anunció que se pondría a la venta a fines de 2020.

A pesar de llamarse Mustang, el nuevo modelo no es, exactamente, la versión eléctrica del mítico pony car, pues está envuelta en una carrocería de SUV.

El Mustang Mach-E solo es la punta del icerberg de la estrategia de la compañía en la electrificación de sus productos. Y es que la inversión que está realizando en este ámbito, cifrada en 11.000 millones de dólares, dará grandes frutos. Concretamente, servirá para lanzar 16 vehículos 100% eléctricos hasta 2022.

1. Autonomía de 600 km

Este modelo totalmente eléctrico declara una autonomía de hasta 600 km. Con una sola carga de 10 minutos, en una estación de carga rápida, los conductores del Mustang Mach-E podrán circular hasta 93 km.

2. Ya se puede comprar por internet

Aunque aún no ha llegado al mercado, Ford ya abrió ha el plazo de compra de este modelo en Estados Unidos. Puede hacerse a través de internet, o bien, en un concesionario, claro está cuando finalice el aislamiento físico. Asimismo, la firma del óvalo permite encargar, personalizar e incluso organizar la entrega del vehículo en línea.

3. Adiós a las llaves

Las llaves son cada días más tecnológicas y ofrecen nuevas prestaciones adaptadas a las necesidades del cliente y el entorno. Ahora bien, en el caso del Mustang Mach-E, las llaves son cosa del pasado, pues el auto puede reconocer tu smartphone cuando te acercas, abrir así las puertas e incluso conducir sin tener que sacar el teléfono del bolsillo.

4. Sus inicios

Según informa la compañía, el Mustang Mach-E es el primer proyecto del equipo Ford Edison, una nueva “compañía dentro de una compañía” dedicada a idear vehículos eléctricos. Se llama Ford Team Edison, y está inspirada en el inventor Thomas Edison, que fue un amigo cercano de Henry Ford.

5. Preparado para el futuro

La electromovilidad no es el único factor que caracteriza a este vehículo de futurista. Y es que Ford dotó a este modelo de actualizaciones inalámbricas que le permiten recibir todo tipo de actualizaciones seguras, desde el sistema de activación de voz hasta tecnologías de asistencia al conductor y de rendimiento.

6. Diseño interior premiado

El sistema de sonido B&O que equipa el Mustang Mach-E, con altavoces perfectamente integrados en la parte superior del panel de instrumentos, fue distinguido con el premio de diseño iF.

7. Vidrio de alta tecnología

Su techo de cristal panorámico está cubierto con una protección de infrarrojos que ayuda a que el interior se mantenga fresco en verano y cálido en invierno. Además, una capa en el vidrio ayuda a proteger contra los rayos ultravioleta.

8. Habla con tu Mustang Mach-E

El sistema de activación de voz puede utilizar el procesamiento de voz basado en la nube para entender comandos de conversación como: “Encuéntrame el mejor restaurante tailandés”. También aprende de tus patrones de usuario para ofrecer una experiencia más personalizada. De esta forma, conversarás con tu vehículo como si lo estuvieras haciendo con cualquier amigo.

9. Adapta tu conducción a tu estado de ánimo

El vehículo cuenta con tres modos de conducción, el Whisper, el Active y el Untamed, cada uno de los cuales ofrece diferentes ajustes para los controles de la dirección, la iluminación ambiental e incluso los sonidos del vehículo. De esta forma se podrá adaptar la conducción según cómo nos sintamos en el momento.

10. Su nombre tiene historia

Aunque el Mustang Mach-E es totalmente nuevo, su nombre tiene historia. El nombre “Mach” se ha usado para modelos especiales de Ford Mustang desde los años 60. Originalmente se usó para el Mustang Mach 1, un auto que “parecía que podía romper la barrera del sonido”.