Lewis Hamilton sorprendió hace unos días a sus fanáticos con un video en el que hacía drifting en un Nissan GT-R R34 por las calles y carreteras de Tokio. Video en Instagram que al día de hoy acumula 1,7 millones de “me gusta” y más de 16 mil comentarios.

Pues resulta que más allá de popularidad alcanzada, hay a quienes no les hizo ninguna gracia el “loco paseo” del heptacampeón de F1. Hablamos de la empresa a la que le arrendó el auto, la cual a través de Twitter denunció que Hamilton hizo un uso indebido del vehículo.

“Esta conducción está estrictamente prohibida”, señaló su servicio de atención al cliente a través de su perfil en la red del pájaro azul.

Una consulta a su web también permite comprobar sus tarifas: seis horas cuestan el equivalente a 190 euros ($180 mil), nueve horas son 237 euros ($225 mil) y un día entero son 333 euros ($316 mil). Se alquila sin límite de kilometraje y el único requisito es que el conductor tenga al menos 23 años y tres años de antigüedad.

Así las cosas, Lewis en su día alquiló este Skyline para grabar su particular ‘gymkhana’ por Tokio sin que la empresa fuera consciente de sus intenciones. No han trascendido detalles de si el auto tuvo que pasar luego por el taller, pero parece que está en perfecto estado de marcha porque todavía se ofrece en alquiler.