Ya sea que circule en auto, moto, bicicleta, caminando o en transporte público, la seguridad vial es un tema que les compete a todas las personas por igual, y es que la Organización Mundial de la Salud estima que la cifra de víctimas fatales por siniestros de tránsito ha aumentado a 1,35 millones de personas por año en todo el mundo, según un informe de Bloomberg Philantropies de finales de 2018.
En este registro se da a conocer que las mayores tasas de mortalidad en accidentes vehiculares se producen en países de bajos recursos, algo que se da principalmente por los menores estándares de seguridad exigidos a los autos para circular por las calles.
Si bien los modelos vendidos en países de mayores ingresos son cada vez más seguros, solo el 40% de 175 países han adoptado los estándares prioritarios de seguridad vehicular recomendados por las Naciones Unidas.
Mejorar la seguridad estructural de los autos para choques frontales y laterales, agregar control de estabilidad y actualizar las medidas de protección para los peatones y usuarios vulnerables de las vías (UVV), son pasos vitales. Si Argentina, Brasil, Chile y México adoptaran todos los estándares prioritarios desde 2020 se podrían salvar más de 25.000 vidas y evitar más de 170.000 lesiones graves en la próxima década.
El secretario general de Latin NCAP, Alejandro Furas, quien además es el actual vicepresidente técnico y secretario general de Global NCAP, visitó nuestro país para realizar una charla técnica acerca de la importancia de mejorar los estándares se seguridad en el país, el que, a pesar de tener algunas de las normas más estrictas de la región, todavía permite la venta de modelos que han obtenido cero estrellas de protección a los ocupantes en las pruebas de impacto de la Latin NCAP.
"No basta con creer que porque a Chile llegan modelos que se venden en Europa o Estados Unidos van a cumplir exactamente con los mismos estándares de la Euro NCAP. Hemos visto casos de modelos que salen de la misma fábrica, pero que, al ser comprados en distintos mercados (México y Estados Unidos, por ejemplo), han obtenido resultados absolutamente dispares", señala el ejecutivo del organismo de seguridad.
Para salvar cerca de cinco millones de vidas y reducir a la mitad las proyecciones de fallecidos de los próximos años, Naciones Unidas propone cinco pilares fundamentales a trabajar, "una agencia líder (en este caso Conaset), una infraestructura mejorada, vehículos más seguros, conductores más seguros y la atención post crash, es decir, todo lo que ocurre después del choque. El documento de la ONU dice que para obtener cambios hay que avanzar en todos estos puntos por igual", puntualizó el secretario general de Latin NCAP.
Con más de 120 resultados publicados a la fecha, el organismo independiente de seguridad busca poner a disposición de las personas una evaluación de seguridad de los modelos disponibles en la región, sometiendo a prueba las versiones más básicas de los vehículos a la venta. "Si hay algo que admirarle a Chile es que su objetivo es ser como los países del primer mundo en temas de seguridad, pero hay muchas normas que, una vez establecidas, no se fiscalizan como deberían, afectando directamente en las evaluaciones", agrega el ejecutivo.
“De parte del gobierno de Chile hay una intencionalidad clara de exigir más seguridad e informar mejor al consumidor. Hay una responsabilidad social de los gobiernos y los medios de entregar mejor información de seguridad, de educar a los conductores. Hay que sacar el tema del ámbito automotriz y convertirlo en un tema de salud pública. Esto es un problema social, de todos. La seguridad es la vacuna para la pandemia más grande que está matando hoy a la gente joven, y hay algunos tratando de evitar que la gente lo sepa”, finaliza Furas.