Nueve años después de que el escándalo mundial del “Dieselgate” sacudiera la industria automotriz, el ex presidente del Grupo Volkswagen, Martin Winterkorn, se enfrentaría a la justicia en un juicio que iniciaría hoy en el tribunal de Brunswick, al norte de Alemania, cerca de la sede central de Volkswagen.
Sin embargo, la justicia alemana ha dicho lo contrario, suspendiendo, como pronto, hasta 2025 el juicio penal abierto. Y es que una caída de Winterkorn ha obligado a paralizar el proceso, luego de que el tribunal estudiara un informe médico sobre el estado de salud del empresario alemán, a través del cual avisa que “no va a poder asistir a las vistas judiciales durante, al menos, los próximos meses”. De ahí, que el magistrado encargado del caso decidiera esperar a ver cómo evolucionan los hechos.
El expresidente ejecutivo de Volkswagen, hace años el empresario mejor pagado de Alemania, se ha visto envuelto en el escándalo de las emisiones de los vehículos del grupo, después de que en 2015 los reguladores estadounidenses descubrieran que algunos motores diésel del grupo alemán habían sido programados intencionadamente para falsear los resultados de las pruebas de emisiones, de manera que se vendieron a los clientes sin cumplir con los estándares medioambientales que el grupo aseguraba cumplir. Por ello, el conglomerado alemán ha tenido que pagar hasta ahora más de 30.000 millones de euros en multas a indemnizaciones.
Winterkorn está acusado de fraude comercial, manipulación del mercado y falsedad en sus declaraciones, según el escrito de más de 600 folios remitidos por la acusación al tribunal.
En concreto, al ex CEO de Volkswagen se le acusa de no impedir el uso del software alterado de medición de emisiones una vez que se enteró de su existencia, lo que permitió que se vendieran 9 millones de autos con esta trampa en Europa y Estados Unidos, causando un perjuicio total de 100 millones de euros a los clientes.
La segunda acusación alega que Winterkorn y otros dos miembros del consejo de entonces informaron demasiado tarde a los mercados sobre el amaño de las emisiones diésel.
La tercera acusación fue presentada por los fiscales de Berlín en 2021 en la que alegan que Winterkorn mintió al testificar en una investigación parlamentaria en enero de 2017.