El año 2007 fue uno importante para el mercado automotor nacional. Es que hace más de una década se produjo el tímido aterrizaje de las marcas chinas de autos, un desembarco iniciado por Great Wall y que no estuvo exento del escepticismo de los consumidores respecto de la calidad de los vehículos que venían del gigante asiático. Hoy en día aquellos miedos parecen estar superados y así lo demuestran las cifras: más de un 18% de las ventas en el país corresponden a autos ‘made in China’. A tal punto se han suprimido esos temores iniciales, que ahora no solo marcas chinas -como Chery, JAC, Changan, Great Wall, Haval, Maxus o MG- importan desde el Dragón Asiático, sino que otras generalistas se han atrevido.
La última marca es sumarse a este origen es Ford, con el anuncio del arribo del nuevo SUV Territory. Pero no es la única, de hecho, incluso marcas de alta gama importan vehículos desde el gigante asiático. ¿Sabes cuáles comercializan vehículos chinos?
- Kia Soluto
La firma coreana, antes de Ford, fue la penúltima en sumarse al listado, con el estreno del sedán compacto Soluto. El modelo de motor 1.4 litros y caja manual de cinco marchas se enfoca principalmente en los pequeños empresarios de los rubros de taxistas y colectiveros y arribó en dos versiones. Tal vez ese sea su gran pecado, puesto que el modelo de entrada no equipa aire acondicionado.
- Hyundai Verna
Y si Kia no es la penúltima, es porque después se plegó a la tendencia de las importaciones chinas su hermana de Hyundai. La firma representada por Automotores Gildemeister lanzó en febrero el Verna, idéntico en ingeniería y mecánica al Soluto, pero con el sello de Hyundai. Cae en el mismo pecado de su hermano, es decir, no trae aire acondicionado de base.
- Chevrolet Sail, Cavalier, Groove, Captiva y el furgón N400 Max
La marca del corbatín demuestra que el origen chino no necesariamente constituye una mochila. De hecho, su modelo más exitoso corresponde justamente a uno asiático. Se trata del sedán Chevrolet Sail, que registró en 2020 un total de 5.208 matriculaciones y así se ubicó como el segundo auto de pasajeros más vendido del año (por detrás del Suzuki Baleno). Se vende en tres versiones, todas con motor 1.5 litros y caja manual de cinco relaciones.
Pero el exitoso Sail está lejos de ser el único chino de Chevrolet. Desde 2017 también lo acompaña el Cavalier, un sedán más corpulento que también monta un bloque de 1.500 cc pero que se liga a cajas manual de cinco o automática de seis relaciones.
En el line-up de familiares, el que saca la cara por China es el Chevrolet Captiva que esta vez se presenta con un motor 1.5 turboalimentado y, por último, en los comerciales el furgón N400 Max -llegado en enero pasado- cierra el batallón de los ‘made in China’ de Chevrolet.
El encantamiento de Chevrolet Chile con los autos chinos está lejos de terminar y para mejor muestra, la marca estrenó en octubre de 2020 el SUV Groove. El nuevo familiar más chico del corbatín se destaca por un buen equipamiento en seguridad desde su versión base, que vale $ 10.990.000.
- Volvo S90
La marca de Suecia fue la primera de las de alta gama en atreverse a comercializar un modelo fabricado en China. Se trata del sedán S90 que es producido en la planta del Grupo Geely en Daqing. Este modelo se comercializa con motores 2.0 turbo y 2.0 turbodiésel, y precios que van desde $ 37.990.000 a los US$ 87.590.
Cuando le consultamos al gerente de la marca acerca de la decisión de importarlo desde China, señaló que “todas las versiones del Volvo S90 provienen desde China” y la decisión de traerlo desde ese origen “responde a una estrategia global de la marca que fue develada hace dos años donde se anunció el inicio de la producción de las versiones más equipadas del S90 en la planta de Daqing en China. Además, Volvo proyectó que toda la producción del sedán, en el corto plazo, se llevaría a cabo en la mencionada fábrica asiática, incluidas las que van destinadas al mercado europeo. Actualmente, todas las variantes del Volvo S90 son producidas ahí y cumplen fielmente con el ADN característico de la marca y los más altos estándares de fabricación”.
- Ford Territory
La firma del óvalo incorporó su primer modelo ‘made in China’ en agosto de 2020. El Ford Territory fue exhibido en el Salón de Sao Paulo en 2018 y causó buena impresión en la prensa y el público general, dice Ford.
“El mercado chileno está maduro respecto de los autos de origen chino. Por otro lado, se trata de un SUV de Ford que responde a lo que la gente conoce de la marca. Tenemos una reputación que cuidar”, señaló hace unos meses Hernán Xanthopoulos, gerente de Ford, respecto de una potencial reticencia que podría encontrar el modelo al tratarse de un vehículo chino.
El modelo es fabricado en Xiolan, al sureste de China y vino a posicionarse entre medio del Escape y el Edge. A nivel motriz dispone de un motor bencinero turbo de 1.5 litros, que desarrolla 143 caballos y 225 Nm entre 1.500 y 4.000 rpm, y que se gestiona mediante una caja automática CVT, encargada de llevar la fuerza al eje delantero. Homologa un consumo combinado de 12,2 km/l. Se comercializa en dos versiones, con un precio de lista de $ 17.890.000, para la versión Trend, y de $ 20.390.000, en el caso del Territory Titanium.