La firma británica Bentley ha confirmado que le ha puesto tarea a uno de sus modelos más reputados. Se trata de la misión encomendada al Continental GT para establecer un nuevo récord para un auto de calle en la subida de Pikes Peak, el próximo 30 de junio. El desafío es un apuesta arriesgada del constructor de Gran Bretaña, pues se da justo en los 100 años de la fundación de Bentley y, por ende, no hay margen de error. El objetivo es quebrar el tiempo de 10:26.9.

Para conseguir su propósito, el Bentley Continental GT está equipado de un bloque twin turbo W12 de 6.0 litros. La unidad puede exigirse hasta desarrollar 635 -y 900 Nm de torque- que se van a ambos ejes mediante una caja automática de doble embrague. Alcanza los 100 km/h en solo 3 segundos y empina la aguja del velocímetro hasta los 333 km/h.

Esta está lejos de ser una prueba desconocida para la firma fundada por Walter Owen Bentley. En 2018 ya reclamó el récord de auto SUV, el que fue conseguido a bordo de un Bentley Bentayga que paró el reloj en 10:49.9 a una velocidad promedio de 107 km/h. El registro fue dos minutos por debajo de la anterior marca.

"Hemos tomado mucho aprendizaje de nuestra exitosa expedición a Pikes Peak el último año con el Bentayga y lo hemos aplicado en nuestra preparación para esta ocasión. Estamos orgullosos de demostrar que las amplias habilidades del Continental GT en una prueba de talla mundial", señaló en un comunicado Brian Gush, director de la división motorsport de Bentley.

Cabe destacar que el Continental GT que se empleará en la prueba es el mismo que se comercializa en Chile desde noviembre del año pasado.