El próximo 27 de junio se desarrolla la 99ª edición de la denominada “carrera de los cielos”. La Pikes Peak Internacional Hill Climb es una carrera que se disputa desde 1916 en las Montañas Rocosas de Colorado, en Estados Unidos y aunque los vehículos deben recorrer “solo” 20 km, el desafñio es que lo hacen en ascenso y superando nada más que 156 curvas con casi 1.500 metros de desnivel.
La competencia ha servido en los últimos años como un laboratorio de pruebas para distintas marcas. Volkswagen, por ejemplo, probó en este lugar sus desarrollos para vehículos eléctricos con el Volkswagen I.D. R. y ahora Bentley anuncia los detalles del Continental GT3 que llevará a la prueba y que se mueve por e-gasolina, un combustible renovable que es parte de un programa de estudio de la compañía llamado Beyond 100 y que tiene por objetivo ofrecer combustibles amigables con el medio ambiente a los clientes de Bentley, sin olvidar por supuesto su desafío de electrificación.
Los modelos toman la línea de salida a 2.835 msnm y trepan a una meta ubicada a 4.298 metros. Ahí, el aire es una tres veces más liviano que a nivel del mar, por lo que siempre Pikes Peak es un gran desafío.
Y para Bentley es un lugar especial, debido a que hace tres años convirtieron al Bentayga en el SUV de producción más rápido que completaba la famosa carrera. Al año siguiente, la firma de la B alada llevó al Continental GT reclamar el trono del auto de producción más veloz en la prueba de Colorado Springs.
Para cumplir ahora con el nuevo plan en la categoría Attack T1, la compañía británica tendrá una serie de modificaciones para el Continental GT3 Pikes Peak, desde ajustes en la aerodinámica, al chasis y el motor.
El propulsor del modelo que competirá al mando del piloto Rhys Millen será un V8 biturbo de 4.0 litros, capaz de generar más de 750 caballos de fuerza con un par de 1.000 Nm.
Como principal novedad, tendrá combustible renovable de carreras. Es una mezcla de biocombustibles avanzados diseñados específicamente para el automovilismo, por lo que se ve como un puente tecnológico para los eFuel, aquellos productos creados de manera sostenible con una reducción de gases de efecto invernadero de hasta 85%.
La caja será la unidad de carreras estándar de Bentley, ya diseñada para manejar las cargas de torsión involucradas, pero el diámetro del eje de transmisión trasero se ha aumentado para proporcionar una durabilidad mejorada.
El chasis, por su parte, se configuró para adaptarse a la naturaleza de Pikes Pikes, mejorando la carga aerodinámica en un 30%. El alerón trasero ahora es el más grande instalado en un Bentley y está instalado sobre un difusor trasero altamente eficiente que rodea la caja de cambios del transeje.
Si quiere batir un nuevo récord, el Continental GT3 tendrá que completar las 156 curvas a una velocidad media superior a los 125,5 km/h y cruzar la línea de meta en menos de nueve minutos y 36 segundos, tiempo que demoró el Porsche 911 GT2 Clubsport. El 27 de junio veremos si lo logra.