Antes de que se convierta en una marca 100% eléctrica en 2030, Bentley le sacará el jugo a sus motores térmicos para despedirlos a lo grande. Muestra de ello, es el nuevo Bentley Mulliner Batur, un auto de lujo aún más impactante de lo normal, con detalles tan exquisitos impresos en 3D y en oro de 18 quilates.

Con el sello del departamento de personalización de la firma británica, solo se fabricarán 18 ejemplares de este especial modelo, cada uno hecho a mano durante varios meses en el taller de Mulliner, estimándose las primeras entregas para mediados de 2023. ¿Su precio? nada menos que 1,95 millones de euros. Igualmente, toda la producción ya está vendida.

Pues bien, el Batur luce una agresiva carrocería coupé, que combina rasgos típicos de Bentley con el lenguaje de diseño que adoptarán los Bentley de cero emisiones a partir de 2025. Así exhibe unos faros frontales más afilados que nunca y una parte trasera más agresiva de lo normal.

La enorme parrilla delantera de Bentley sigue acaparando buena parte del protagonismo del diseño exterior, pero también ha sido rediseñada y se combina con un llamativo parachoques con enormes entradas de aire, que ayudan mantener refrigerada la enorme mecánica que se esconde bajo el capó del Batur.

Estamos hablando del Bentley más potente de la historia. Si bien la firma recurre al archiconocido motor W12 de 6.0 litros que usa el resto de la gama, gracias a una serie de modificaciones, entrega “más de 740 CV 1.000 Nm de par”.

Para llegar a estos números, dicha mecánica recibe un nuevo sistema de admisión, nuevos intercoolers, dos turbocompresores mejorados y una completa revisión de la electrónica.

Dispone de un sistema de escape deportivo de titanio completamente nuevo y fabricado a través de impresión 3D. Así también cuenta con una suspensión neumática ajustable y el denominado Drive Dynamics Control con los modos Sport, Bentley, Comfort y Custom.

Tampoco podemos olvidarnos del diferencial electrónico de deslizamiento limitado (eLSD), la vectorización del par por medio de los frenos y un equipo de detención CSiC de carbono, con discos delanteros de 440 mm y traseros de 410 mm, combinados con pinzas de 10 y cuatro pistones respectivamente. Por cierto, el Batur monta unas llantas de 22 pulgadas hechas a medida con neumáticos Pirelli.