El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firma este jueves una orden ejecutiva dirigida a conseguir la meta de que la mitad de los autos que se vendan en 2030 en ese país sea de cero emisiones (o bajas emisiones) y, además, propondrá nuevas reglas para vehículos para reducir la contaminación a 2026, dijo la Casa Blanca.

El objetivo del presidente Biden, que no es por ahora vinculante, cuenta con el apoyo de los principales fabricantes estadounidenses y extranjeros que advirtieron que se requeriría miles de millones de dólares en fondos gubernamentales. El mandatario demócrata había prometido durante la campaña presidencial que daría un fuerte impulso a la electromovilidad.

“Tenemos que actuar”, dijo el secretario de Transporte de Estados Unidos, Pete Buttigieg, en una entrevista con el canal CNBC. “Este objetivo de lograr que la mitad de nuestros vehículos nuevos sean eléctricos dentro de la década será necesario con urgencia para que podamos cumplir con el imperativo del clima en nuestros días”, agregó, en declaraciones que recoge la agencia Reuters.

En un comunicado conjunto, los tres gigantes norteamericanos (General Motors, Ford Motor Company y Stellantis) dijeron que precisamente aspiraban “a lograr ventas del 40-50% de los volúmenes anuales de autos eléctricos para 2030“.

El objetivo del 50% de Biden y la aspiración del 40-50% de los fabricantes de automóviles incluye vehículos híbridos enchufables, híbridos convencionales y 100% eléctricos. Hasta ahora Biden se ha resistido repetidamente a las llamadas de muchos demócratas para establecer un requisito vinculante para la adopción de vehículos eléctricos o para seguir a California y fijar 2035 como una fecha para eliminar la venta de nuevos vehículos ligeros a gasolina.

El mercado estadounidense pone anualmente unas 17 millones de unidades.