BMW celebra 25 años de innovaciones y de visión de futuro en Silicon Valley
La Oficina de Tecnología de la marca alemana en Estados Unidos festeja las bodas de plata con la ciudad de San Francisco estrenando en Norteamérica el conceptual BMW Vision Neue Klasse y adelantando algunos desarrollos que apuestan a revolucionar la movilidad.
Una fiesta de la innovación, de avances, de imaginación, de fantasía. Con una pequeña fiesta en el Hotel Nai de San Francisco, BMW Group celebró 25 años de la Oficina de Tecnología de la marca en Estados Unidos. En 1998, la firma bávara se atrevió e instaló en Palo Alto, en el estado de California, para abrir una sede que se plantearía como objetivo soñar con lo mejor para la movilidad.
Desde ese hito fundacional ha pasado un cuarto de siglo. Las instalaciones ya no están en Palo Alto, ahora se levantan en Mountain View, pero la base del plan original no ha variado, enfocándose en tecnologías emergentes, con un pensamiento centrado en el usuario y trabajando en el diseño de productos que permitan visualizar el futuro de los productos de BMW.
Para eso se valen de equipo de una treintena de pensadores creativos, visionarios e ingenieros que se encargan, como dice la marca “de explorar lo posible y empujar los límites para crear las mejores y más innovadoras experiencias para los clientes de BMW Group”.
La celebración también tuvo un invitado central: el conceptual BMW Vision Neue Klasse, modelo que se destapó en el Salón de Múnich y que ahora tuvo su estreno en América del Norte, con Frank Weber, miembro del Consejo de Administración de BMW Group para Desarrollo, entregando impresiones sobre la relevancia que puede tener este modelo cuando llegue al mercado en 2025.
Es tan relevante el concepto del Neue Klasse para la marca alemana que incluso lo equipararon en cierta forma con el BMW 1500 que se destapó en el Salón de Frankfurt de 1961 y que es, hasta ahora, uno de los vehículos más relevantes en la historia de la compañía. Y eso es precisamente lo que esperan que sea el Neue Klasse.
“Ideas tecnológicas de vanguardia con mucho potencial, desarrolladas en el corazón global de la tecnología y perfeccionadas en nuestra red de innovación global. Así es como funciona nuestra Oficina de Tecnología BMW en Mountain View”, comentó Weber en la celebración de los 25 años de la oficina de tecnología, agregando que “estoy muy emocionado de ver qué impulsos visionarios para nuestras innovaciones revolucionarias va a desarrollar nuestro equipo en el futuro”.
De avances y desarrollos tecnológicos
La Oficina de Tecnología de BMW Group en Estados Unidos se convirtió en la primera instalación de su tipo del grupo fuera de Múnich cuando abrió sus puertas en 1998. Como les contábamos anteriormente, originalmente estaba ubicada en Palo Alto, pero en 2011 se trasladó a su ubicación actual en Mountain View, donde son vecinos de Google.
Hoy la instalación de BMW forma parte de una red global de oficinas de tecnología del grupo germano, las que están estratégicamente ubicadas en puntos clave alrededor del mundo. Además de Silicon Valley y Múnich, el resto se encuentran en Seúl, Shánghai, Singapur, Tel Aviv y Tokio.
Los avances en esta oficina californiana son llamativos y como grandes logros nos cuentan que acá se desarrolló en 2001 el primer prototipo para conexión inalámbrica con un celular. Era un Motorola de esos con tapa y botones físicos.
Otra hito en la innovación en Silicon Valley fue la primera integración de un iPad con el sistema de audio de un automóvil. Eso ocurrió en 2004.
Esos son algunos ejemplos que indican que el objetivo y la misión colectiva de esta red global de oficinas tecnológicas es recopilar información local, identificar desarrollos emergentes y trabajar con socios clave para visualizar el futuro de los productos y experiencias de los usuarios.
Para conocer este trabajo, BMW realizó una invitación a un pequeño grupo de periodistas de Latinoamérica, quienes pudimos ver en primera persona algunos de esos avances en los que trabaja la marca bávara.
El traslado a la oficina en Mountain View, por suerte no fue en una van, sino que nos permitieron manejar un BMW i5, modelo eléctrico que llegará en los próximos meses a Chile y sobre el cual les contaremos pronto en una nota con más detalles.
Tras cerca de media hora de recorrido, llegamos a una oficina relativamente pequeña para lo que uno podría imaginarse, pero todo en un ambiente muy de Silicon Valley, con escritorios a la vista y hasta una mesa de ping pong al centro del segundo piso.
En esta instalación nos recibieron creativos de la marca para ofrecer una serie de charlas para conocer en lo que trabajan por estos días (y sobre lo que se puede adelantar obviamente).
De esta manera, pudimos conocer los desarrollos sobre el desarrollo de baterías para vehículos eléctricos. Apoyados por una firma de capital de riesgo independiente de BMW, adelantaron que pronto debutará un nuevo sistema de almacenamiento, desarrollado por Our Next Energy (ONE) el cual contiene dos tipos de celdas con diferentes químicas de batería, las cuales podrán satisfacer las necesidades de los trayectos urbanos (cerca de 250 km) y también los viajes más largos. Esta nueva batería Gemini tendrá una autonomía de casi 1.000 km con una sola carga y ya fue probada con éxito en un iX, donde recorrió 979 kilómetros.
La segunda estación fue para conocer el Asistente Personal Inteligente (IPA, por sus siglas en inglés). Montado en un MINI Countryman, será la próxima generación de asistente de voz en vehículos de BMW Group y estará asociado a Alexa.
Tras un breve descanso, luego nos interiorizamos de los trabajos con Realidad Aumentada (AR)/ Realidad Virtual (VR). Acá conocimos, por ejemplo, que el primer desarrollo de esta tecnología como Head up Display se incorporó en el casco del piloto de F1 Ralf Schumacher en 2002, cuando el alemán corría con el equipo Williams y era provisto de motores por BMW.
Desde ahí pasaron una serie de creaciones, con lentes para motociclistas con realidad aumentada, hasta llegar a lo que hoy se conoce como Realidad Mixta, donde un conductor puede desplazarse en un auto real, pero viendo a través de un visor de realidad virtual una realidad completamente diferente.
Esta experiencia la complementamos con una prueba empírica al mando de un M4 en el estacionamiento del Levi’s Stadium, el estadio de los 49ers.
Fue realmente alucinante. Literal nos sentíamos como en un videojuego, pero al mismo tiempo sabíamos que estábamos llevando uno de los vehículos más poderosos y entretenidos de manejar. Fue la fusión de los mundos virtual y físico.
Por último, visitamos la estación Mentalidad innovadora. Acá, un ingeniero británico nos habló con enorme pasión sobre las ideas del equipo de exploradores y creadores de la oficina. En el nivel más específico, adelantó los trabajos que se hacen con fragancias para que los ocupantes del auto tengan un viaje de aroma dinámico. Este avance aún no ha sido lanzado al mercado y lo pudimos experimentar en las plazas traseras de un Serie 7, conociendo una experiencia multisensorial que va de la mano con el contexto del viaje para entregar una mejor sensación de viaje.
Como se ve, un mundo de posibilidades, de fantasías creativas al servicio de la movilidad. Algunos avances llegarán al mercado, otros seguramente irán mutando o quedando en el camino y ese es precisamente uno de los objetivos de la oficina de tecnología de BMW, ser capaces de soñar y de abrir la mente a revolucionarios desarrollos que guíen la movilidad del futuro.
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