A inicios de julio un rumor comenzó a tomar fuerza en el mundo motor. Según consignó The SuperCar Blog, y tal como te lo contamos en MT, los ingenieros de Bugatti alistaban una versión mejorada del ya espectacular Chiron. Conforme pasaron los días, fue la propia compañía la que confirmó a través de un comunicado el desarrollo del nuevo tope de línea de su exclusivo portafolio.
Una bestia que no teme a las leyes de la física
Así finalmente la expectación creció hasta la noche de este viernes, cuando el flamante Bugatti Divo fue destapado en el Concours d’Elegance de Pebble Beach, un evento que se ha transformado en la gran cita de las marcas de lujo.
El Divo mantiene las especificaciones mecánicas del Chiron, es decir monta un bloque bencinero de 8.0 litros de configuración W16, asistido por cuatro turbos, capaz de desarrollar una potencia máxima de 1.500 caballos.
Donde el Divo es una completa innovación es en términos de ingeniería aerodinámica. El hiperdeportivo francés rebaja en 35 kilos el peso del Chiron, pero aumenta 90 kilos en la carga aerodinámica, la que finalmente queda en 435 kilos totales. Asimismo, el linajudo Divo añade nuevas entradas y salidas de refrigeración y un alerón de 1,83 metros, 20% más largo que el de su hermano.
En cuanto a su performance, el nuevo modelo no es más rápido que el Chiron. De hecho, al poseer una mayor carga aerodinámica su velocidad final se estira “solo” hasta los 380 km/h, 70 menos de los 450 km/h que puede promediar el Chiron. “El Divo fue especialmente pensado para tomar las curvas”, sostuvo Stephan Winkelmann en el estreno del nuevo bólido de Bugatti.
Divo homenaje
La denominación Divo de este nuevo actor en el segmento de los hiperdeportivos, no es casual. Se trata de un guiño a la historia de Bugatti en el mundo motorsport y su piloto Albert Eugène Diwo quien en la década del 20 ganó en dos ocasiones la carrera Targa Florio a los mandos de un Bugatti.
El precio del nuevo Divo es de nada menos que € 5 millones por unidad, se producirá en una partida de 40 ejemplares y, pese a su costo, eso parece no importarle demasiado a sus nuevos dueños. Es que el Divo ya tiene completa todas sus reservas.