Kia aprovechó el CES de Las Vegas para dar a conocer su estrategia ‘Platform Beyond Vehicle’, que será la base de su próxima gama de vehículos comerciales eléctricos. Con ellos, la marca coreana buscará “redefinir el concepto de espacio gracias a interiores avanzados y personalizados que brindan máxima libertad y flexibilidad”.
Así, Kia se adentrará en el mercado de las minivans de transporte de personas y de mercancías con tres formatos bien diferenciados, más pequeños o grandes en función de las necesidades y que cuentan con módulos intercambiables según el servicio que se vaya a hacer.
El primero en salir a la luz será el PV5 en 2025. Estará pensado para servicios públicos y de reparto urbano, con versiones Basic, Van High Roof y Chassis Cab. En el futuro, se habla incluso de que el PV5 servirá de base para lanzar un robotaxi desarrollado en colaboración con empresas externas. En un auto sin conductor, ¿quién tiene la responsabilidad en un accidente?
Por su parte, el Kia PV1 será el más pequeño de todos y está pensado para desplazarse sin problemas por las zonas urbanas, además de estacionar fácilmente. Se podrá ubicar claramente como vehículo de última milla. En el otro extremo, estará el PV7, que como el PV5 ofrecerá diferentes opciones de carrocería y seguro que es el que más potencia y autonomía dispondrá.
Kia insiste en la polivalencia de esta nueva línea de negocio, refiriéndose a la versatilidad que tendría cada uno de ellos al poder ser “un taxi durante el día, una furgoneta de reparto por la noche o un vehículo recreativo personal los fines de semana”.
En una segunda fase, Kia prevé que estos vehículos evolucionen “hacia plataformas de movilidad basadas en Inteligencia Artificial que utilizan datos para interactuar con los usuarios y garantizar que los vehículos estén siempre actualizados”. En la tercera, estos PBV se transformarán hacia soluciones de movilidad personalizadas.