Cada día se hace menos raro la presencia de marcas chinas en Europa, sobre todo desde que la electromovilidad ha comenzado a ganar terreno. Y es que los fabricantes del Dragón Asiático que iban por detrás en materia de motores de combustión, ahora están al mismo nivel en lo que a autos eléctricos se refiere.
Así siguiendo la estela de BYD, Nio, Aiways y MG, entre otras, Chery se apronta a desembarcar en el Viejo Continente, expandiendo aun más sus fronteras. A Chile llegó hace 15 años, hito que por estos días se encuentra celebrando la marca asiática.
Pues bien, el objetivo de Chery para con Europa es establecerse a partir de la segunda mitad de esta década y de forma progresiva, primero en Reino, Unido, Italia o España y más tarde en el resto de países. Lo hará exclusivamente con autos eléctricos y, en principio, todos ellos serán SUV, como el Chery Omoda 5.
Chery, sin embargo, no solo venderá autos en Europa, sino que también busca producirlos ahí. Para ello, la firma china acaba de firmar un acuerdo de colaboración para instalarse en Barcelona, España. La idea es levantar una fábrica en territorio catalán que debería ensamblar 300.000 unidades anuales y supondría la creación de unos 1.500 puestos de trabajo.
El acuerdo entre Chery, la patronal y los sindicados facilita la instalación del fabricante chino en Barcelona, pero todavía no se ha elegido ningún lugar para construir la fábrica. El siguiente paso es que una delegación de Chery escoja los terrenos para establecer su cadena de producción europea.
Ahora que es más caro que nunca el transporte desde China, Chery tiene claro que puede ahorrar costos a través de la producción local. De esta forma, también evita tener que cerrar acuerdos con empresas europeas, como DR Automobiles, la firma italiana que vende actualmente algunos SUV de Chery remarcados en Italia y el resto de Europa.