La presión de los neumáticos es un factor esencial para el buen funcionamiento de cualquier vehículo. En todo orden de cosas, siempre es preferible prevenir antes que lamentar, por lo que la industria automotriz desarrolló un Sistema de Monitoreo de Presión de Neumáticos (TPMS, por sus siglas en inglés) dedicado precisamente al control constante de los niveles óptimos de presión.

El sistema puede utilizar sensores y módulos que transmiten los datos de la presión exacta de los neumáticos hacia el computador del vehículo y que el conductor puede ver en el tablero de instrumentos del vehículo.

Más allá de mostrar que hay una rueda desinflada, la pérdida de presión puede traer otras consecuencias negativas como pinchazos o accidentes por baja reacción al frenar. Por esta razón, el Product & Sales Manager de SAIC Motor -fabricante de MG-, Christian Scheel, comenta que estos equipamientos y sistemas que vienen incorporados en los modelos de MG Motor “tienen como objetivo entregarle mayor confianza y seguridad al conductor, además de conocimiento sobre las condiciones óptimas que deben mantener los vehículos y sus neumáticos, en este caso”.

El indicador de baja presión, consiste en un símbolo amarillo que se ilumina en el panel del tablero de instrumentos con la forma de un neumático precisamente, con un signo de exclamación en medio.

Ahorro de combustible

Más allá de conocer la presión exacta, otros beneficios de contar con el TPMS es la mejora en el consumo de combustible, ya que si los neumáticos tienen menos aire de lo indicado el motor tiene que hacer más esfuerzo para mover el vehículo.

Otra ganancia de mantener la presión adecuada es extender la vida útil de los neumáticos. Los neumáticos poco inflados son una de las principales causas de falla y pueden contribuir a otros problemas como la aparición de grietas, entre otros.

De hecho, un neumático que está inflado en solo un 20% puede reducir su vida útil en un 30%. Al contrario, los neumáticos sobre inflados, pueden ser más susceptibles a daños externos.

Sumado a la seguridad, la eficiencia de combustible y la duración de los neumáticos, el Sistema de Monitoreo de Presión de Neumáticos también tiene beneficios para el medio ambiente, ya que al estar con la presión correcta los vehículos emiten menos monóxido de carbono a la atmósfera, ya que el motor del auto hace menos esfuerzo.