Contestar una llamada desde el volante, reproducir la música favorita por streaming, viajar a destinos desconocidos -solo guiado por alguna app de geolocalización- o enviar un mensaje apenas utilizando la voz, son cuestiones que hoy parecen muy natural y compatibles con la tarea de conducir gracias a la llegada de los sistemas Apple CarPlay y Android Auto. ¿Pero qué opciones hay para modelos algo más veteranos, fabricados antes del aterrizaje de estas tecnologías? ¿Se pueden adaptar pantallas? ¿Cuánto cuesta?

Una buena muestra de la popularidad de estos sistemas, es que marcas premium como Jaguar (ver nota) o Porsche (ver nota) se han esmerado por ofrecer dispositivos oficiales de aftermarket -de uno o doble din- especialmente creados para calzar con las líneas de los tableros de sus clásicos y que al mismo tiempo dan ese upgrade tan necesario y útil.

Opciones para hacer el upgrade

Ahora, en el caso de modelos que no son necesariamente clásicos o que son de marcas generalistas, Francisca Contreras, socia fundadora de CF Cars, y Gonzalo Guzmán, fundador de Hiendcar, coinciden en que no hay una regla general para determinar cuál es la mejor alternativa, y que, por el contrario, hay que distinguir según el modelo específico del que se trate.

Contreras detalla que en CF Cars, empresa nacida en 2016, son especialistas en marcas tradicionales como Mazda y Volkswagen, y otras premium, como Audi, BMW, Mercedes-Benz y Porsche. “En Mazda lo que hacemos es una actualización original del software de la radio y cambiamos el puerto USB por uno de tipo multimedia. Todo ese conjunto permite tener Apple CarPlay y Android Auto. En Volkswagen se trata de un cambio de pantalla, pero de tipo original, con la misma interfaz que VW trae de fábrica”, explica.

¿Y qué sucede con aquellos vehículos cuya pantalla, aún sin tener conectividad, entrega de todas formas información relevante para la conducción? La experta de CF Cars agrega que “la gran parte de nuestros productos es en base a un menú dual, es decir, que en los autos que ya poseen pantalla y tienen un sistema que muestra el estado del vehículo o el nivel de aire de los neumáticos, por ejemplo, todo se mantiene. Entonces nuestro sistema lo que hace es brindar un segundo menú, permitiendo la conectividad de Android Auto y Apple CarPlay. En modelos de Mazda o de BMW de 2018 en adelante que poseen navegación, podemos hacer activaciones originales. En esos casos, con mayor razón se conserva todo. Es como desbloquear algo oculto”, puntualiza.

Los precios por una actualización, el modo menos invasivo si se quiere, bordea los $ 250 mil. En Volkswagen suben a unos $ 400 mil, para luego dar el salto a modelos de alta gama, en cuyo caso los valores oscilan entre los $ 720 mil y el millón de pesos.

En Hiendcar, empresa especializada además en audio de alta fidelidad, cuentan también con la activación de sistemas mediante la instalación de un módulo Ampire de procedencia alemana -donde se conserva la pantalla, los botones y la estética- o derechamente mediante el cambio de la radio. “En algunos autos se puede, en otros no, entonces depende mucho de diversos factores. Hay que ir caso a caso”, dice Gonzalo Guzmán.

El especialista indica que, siempre que se pueda, la mejor alternativa será hacer el reemplazo completo de la radio. “Nos vamos a las marcas tradicionales, a las de toda la vida: Alpine, Pioneer, que son de lo más confiable y no van a fallar. Si pensamos en un auto estándar, un Nissan, un Mitsubishi, en el que es posible poner una radio de buena calidad con CarPlay y Android Auto, al final se conservan los mandos al volante, adaptando además la estética con la fascia (el plástico negro que rodea la radio o pantalla). Eso sale más o menos entre $ 800 y 900 mil”, añade.

Cuando el cambio de sistema de infoentretención no es posible, en Hiendcar tienen la alternativa del llamado módulo. “Si pensáramos en un BMW antiguo, en un Porsche o un Mercedes-Benz, en los que no se puede cambiar la pantalla o radio, entonces la única opción es instalar un módulo. Este módulo se comunica, hace un by pass entre el aparato radio y la pantalla. Para activar CarPlay debes ingresar a través de un botón, que ahí se ingresa al menú CarPlay, como si fuera otra parte de la radio, que no está en el menú de la radio como tal. Eso a veces podría generar problemas”, comenta.

Esta última opción tiene un valor aproximado de $ 600 mil, aunque Guzmán subraya que cuando se pueda elegir entre uno u otro, será mejor decantarse por el reemplazo completo de la radio. Asimismo, advierte que las radios baratas que muchas veces se encuentran en internet, tarde o temprano dan problemas. “Estas pantallas con sistema Android, son malísimas, incluso pueden presentar más problemas que un módulo CarPlay. Derechamente no las trabajamos, porque el cliente va a tener problemas. Que se le queda pegada la pantalla, que no le lee los periféricos, que suena mal, que se le empiezan a quemar los pixeles o que no responde el touch. Les falla todo”.

Quiénes consultan más por la actualización

Finalmente, sobre qué tipo de clientes busca instalar las funciones Apple CarPlay y Android Auto en sus vehículos, en Hiendcar sostienen que el rango etario es amplio. “No es solo la gente joven. Para nada. Me atrevería a decir que es la población más adulta la más propensa a hacer el upgrade, nada más que por el tema de los mapas, que son muy útiles. La gente más adulta no es de escuchar tanto en Spotify o algo así, solo sintoniza la radio y las noticias, pero sí quiere ver el mapa”, puntualizan.