En medio de la Jinba-Ittai Experiencie, que permite descubrir la unión entre el conductor y el auto a través de la tecnología y el diseño de la filosofía de Mazda, la firma japonesa presentó este viernes la nueva motorización 2.2 turbo diésel que impulsa a la versión tope de línea de su familiar CX-5 .

CX-5

El bloque de 16 válvulas y cuatro cilindros de tecnología SkyActiv, posee un turbocompresor de geometrías variable con el que desarrolla 188 caballos de potencia y 450 Nm de torque bajo el par a los 2.000 giros. Así, el Mazda CX-5 ofrece una respuesta ágil, un rendimiento optimizado y una conducción más placentera. El motor está asociado a una caja automática de seis relaciones, que cuenta con modo sport para trabajar con revoluciones más altas y ofrecer una experiencia más deportiva.

Mantiene el estándar

El Mazda CX-5 -premiado como el mejor SUV 2018 por la prensa especializada del motor- mantiene las líneas de diseño de Kodo, junto con un alto equipamiento. Integra de serie sensores de estacionamiento delanteros y traseros, frenado de emergencia inteligente en ciudad (SCBS), el sistema de asistencia y advertencia de cambio de carril (LAS y LDW), monitoreo de punto ciego y alerta de tráfico cruzado trasero (Advanced BSM), sistema de advertencia en caso de cansancio del conductor (DAA) y faros adaptativos LED, que detectan tráfico en contra y ajustan la dirección de los faros para no encandilar al resto de los conductores.

CX-5

Además, el SUV cuenta con el sistema de tracción inteligente i-Activ AWD que controla la tracción de forma  electrónica, redistribuyendo el torque en situaciones de poca adherencia. Así, el CX-5 puede sortear sin mayores problemas terrenos barrosos o con hielo.

El nuevo Mazda CX-5 GT 2.2L diésel se encuentra disponible en la red Dercocenter partir de $ 22.990.000.