Definitivo: Ford cesa la producción de sedanes en EE.UU. a contar de julio

Cambia, todo cambia. Y la industria automotriz no es la excepción. Tal como te detallamos a fines del año pasado, Ford iba en la dirección de retirarse del segmento de autos de pasajeros, para abocarse de lleno al de los vehículos familiares y las camionetas, como un modo de responder mejor a la creciente demanda de estos dos nichos. Pues ahora, y en la misma línea, el gigante de Michigan concretará el cese de producción del Ford Fusion, el último modelo sedán que ensamblaba en Estados Unidos. La información es original de Ford Authority y fue replicada por Autoblog.

De acuerdo con los portales, una fuente que prefirió resguardar su identidad, habría confirmado que incluso los Fusion en versión radiopatrullas serán definitivamente fabricados en el complejo de Hermosillo, en México, para que Ford de Estados Unidos se concentre únicamente en terminar los pedidos para su propio mercado hasta fines de julio. De todos modos, esa fecha hoy queda sujeta al devenir de la industria producto del coronavirus. En otras palabras, si se reanuda la producción el 18 de mayo, como está establecido hoy, se mantiene julio como la fecha del adiós del Fusion; en caso contrario, podría extenderse, pero no así sus pedidos que están cerrados desde fines de febrero.

La muerte del Fusion también se lleva a su hermano más premium, el Lincoln MKZ que ya tiene fecha de defunción para este mismo año. Así, en dos meses más el Ford Mustang será el único sedán (si es que se puede catalogar así) que Ford venderá en Norteamérica. Por su parte, Lincoln seguirá vendiendo el Continental, aunque todo apunta a que también juega los descuentos.

De acuerdo con Autoblog, el nombre ‘Fusion’ podría volver en el mediano futuro, pero en un cuerpo diferente de vehículo, repitiendo lo ya hecho con el Ford Puma, el crossover que tomó la denominación del antiguo deportivo compacto.

Mientras en Ford Chile ya salieron del portafolio el Focus y el Fiesta, en Europa dichos modelos siguen en vitrina, pero también seguirán la suerte del resto de los autos de Ford a los que la marca decidió poner la lápida.