El motor W12 de Bentley se despide a lo grande

Bentley puso fin a un capítulo importantísimo en su historia. Y es que tal y como te lo anticipamos en 2023, la firma británica ya no construirá más su reconocido W12 6.0L Twin Turbo. Un propulsor que tuvo en producción desde 2003 y del que se hicieron más de 100.000 unidades desde entonces.

Así, la salida del último ejemplar del W12 ha tenido una despedida al más puro estilo Bentley, con una emotiva reunión en la fábrica de Crewe de los equipos humanos que han dedicado sus vidas profesionales al montaje y desarrollo de una bestia mecánica, sin la cual, no puede entenderse la historia moderna de la marca.

El estreno en 2003 del primer Continental GT supuso romper con el decadente pasar que arrastraba la marca desde hace años. Entonces, volvió a ofrecer modelos atractivos y acordes con su tradición, siendo parte fundamental el mencionado motor W12, el cual unificaba dos V6 muy compactos, en dos parejas de bancadas con tres cilindros cada una, compartiendo el mismo cigüeñal. Doce cilindros, en total, dispuestos evocando una “W”.

Al principio este W12 hizo valer sus 552 Hp de potencia durante más de una década hasta que, en 2015, Bentley lo rediseñó por completo, creando una segunda generación dotada con dos turbocompresores para superar ampliamente los 600 Hp. Esta reinterpretación debutó en el Bentayga, su primer SUV.

Tras una longeva y exitosa historia, este bloque hoy deja paso al V8 híbrido, que se estrenó hace unas semanas en la nueva generación del Continental GT.