Bien, pero tampoco espectacular. Así puede describirse la puntuación conseguida recientemente por el Toyota Venza en las pruebas de seguridad de la Insurance Institute for Highway Safety (IIHS) de Estados Unidos. El SUV presentado en mayo y que emplea la misma base del súperventas RAV4 logró la categoría Top Safety Pick (ver informe), aunque no la Top Safety Pick+ reservada solo para modelos con luces entre los rangos ‘bueno’ y ‘aceptable’.

De todos modos, su flamante calificación descansa en excelentes comportamientos en choques de impacto frontal, incluyendo aquellos con superposición a ambos lados, buena respuesta del suelo ante dichos siniestros viales y correcto funcionamiento del frenado de emergencia autónomo con detección de peatones. Entre las 12 y 25 mph (20 y 40 km/h) el Venza derechamente evita una colisión con otro vehículo, en tanto que para un transeúnte, es capaz de prevenir un atropello o al menos de reducir considerablemente la fuerza del impacto.

De esta manera, el pecado del Venza viene a estar únicamente en las luces. Es que si bien en cortes XLE y Limited con faros LED puntúa ‘aceptable’, los LED en la versión de entrada LE apenas tiene categoría de ‘marginal’ al iluminar mal en curvas hacia la izquierda.