Fabricado en 1905, el Skoda Voiturette A fue el primer auto construido por el fabricante checo. Un pequeño vehículo de dos plazas, equipado con un motor V2 con 5 kW (7 Hp), tracción trasera, y 40 km/h de velocidad máxima, del cual solo se fabricaron 44 unidades.
Más de un siglo después, esta joya de la automoción es parte del proyecto “Los iconos se reinventan”, en el cual se trata de visualizar cómo serían hoy los autos legendarios de Skoda si estuvieran fabricados por diseñadores contemporáneos.
Así, del trazo de la joven diseñadora china Yuhan Zhang nace el eVOITURETTE, una futurista reinterpretación del clásico checo, que busca preservar el espíritu del diseño original creado por Laurin & Klement.
La visión de Zhang es una especie de carruaje biplaza moderno y tiene un propósito muy específico: llevar a los turistas de forma autónoma por Praga en un futuro “que aún se le antoja lejano”, según sus declaraciones.
El eVOITURETTE mide tan solo 688 mm de largo, 355 mm de ancho y 325 mm de alto, en tanto, que apenas pesa 10 kilos. Su carrocería tallada en madera artificial está pintada en rojo y blanco, “lo que refuerza el vínculo entre pasado y futuro de la marca”, según Skoda.
Asimismo, tiene una forma muy característica gracias a su capó pronunciado y una posición elevada, para que los pasajeros puedan sentirse como en una especie de sofá.
Por otro lado, el hecho de que la parrilla del radiador y las llantas de las ruedas sean pantallas LED, está relacionada con la idea de conexión que quería transmitir su creadora, pues “se trata de la forma en la que el automóvil podría comunicarse con sus pasajeros”.
El eVOITURETTE puede visitarse en la exposición permanente del Museo Skoda, situada en la casa natal de Ferdinand Porsche en la ciudad de Liberec (República Checa).