Quién podría dudar de los estragos que ha causado -y sigue causando- la crisis mundial provocada por el Covid-19. La industria automotriz por lo menos no. Y ya se ven los resultados, así lo pone de manifiesto el último Initial Quality Study realizado por la consultora estadounidense J.D. Power.
En los 36 años de existencia de este informe, nunca se había constatado un deterioro en la calidad de los vehículos. Según afirman desde la consultora norteamericana, tan sólo nueve de las 33 marcas analizadas mantuvieron su tendencia a mejor en el último año.
Los resultados se obtuvieron de 84.165 compradores de automóviles nuevos en 2022, los cuales respondieron a 223 preguntas sobre experiencia al volante, sistema de infoentretenimiento y ayudas a la conducción, entre otros temas. La encuesta se realizó entre febrero y mayo de 2022.
Para evaluar y clasificar la calidad de los autos, la consultora ideó un indicador: el número de problemas encontrados por cada 100 vehículos o PP100. Cuanto más bajo sea este indicador, mejor será la calidad. Así de las 162 incidencias (por cada 100 autos) registradas de media en 2021, se ha experimentado un alza de un 11% en lo que llevamos de año hasta las 180.
“En general, la calidad inicial ha mejorado constantemente a lo largo de la historia de este estudio, por lo que el descenso de este año es decepcionante, pero comprensible. Los fabricantes de automóviles siguen introduciendo vehículos cada vez más complejos desde el punto de vista tecnológico, en un momento en el que se ha producido una gran escasez de componentes esenciales para su funcionamiento”, afirma David Amodeo, director mundial de Automoción de J.D. Power.
“Las interrupciones en la cadena de suministros, especialmente la escasez de microchips, han llevado a los fabricantes de automóviles a buscar formas alternativas de hacer llegar los nuevos vehículos a los compradores y alquiladores”, continúa. “En algunos casos, los vehículos nuevos se envían sin ciertas características instaladas”.
Diferencias entre clases
Curiosamente, las marcas generalistas acumulan menos incidencias (21 menos de media, en concreto) que las ‘premium’. Lo que tiene su explicación, principalmente, en que estas últimas son la que mayor tecnología a bordo equipan y son los problemas relacionados con ella los que más se registran.
Los sistemas multimedia siguen siendo lo más problemático en los autos nuevos, incluyendo la conectividad Android Auto/Apple CarPlay, el reconocimiento de voz integrado y las dificultades de la pantalla táctil.
Se suman las fallas en los sistemas de ayuda a la conducción, siendo el más revisado el asistente de mantenimiento del carril. Justamente, uno de los ocho sistemas que acaban de volverse obligatorios en la Unión Europea. Revisa aquí cuáles son los otros.
Por esto mismo, los vehículos electrificados salen peor parados que los de combustión: si éstos registran un promedio de 175 incidencias por cada 100 unidades, los eléctricos se alzan las 240 y los híbridos enchufables, hasta las 239.
Por marcas, Buick es la marca de mayor calidad, con el índice de incidencias más bajo (139), seguida de Dodge (143) y Chevrolet (147). Por su parte Genesis (filial de lujo de Hyundai) es la cuarta con 156 y primera entre las ‘premium’, superando a Lexus que se queda con 157.