A solo unos días del debut del McLaren W1, hoy Ferrari contraataca con el estreno del auto más avanzado y rápido de su historia. Se trata del nuevo Ferrari F80, el esperado sucesor del LaFerrari, cuya tecnología proviene directamente de la Fórmula 1 y las 24 Horas de Le Mans.
El F80 es también el heredero de una familia de deportivos legendarios que forman parte de la historia, no sólo de la marca de Maranello, sino de la industria automotriz. Nos referimos al Ferrari 288 GTO, F40, F50, Enzo y, por supuesto, al LaFerrari.
Así la casa de Maranello continúa la saga de los grandes bólidos de Ferrari, que hasta ahora se solían llamar los “Big Five” y que ahora serán seis.
Diseñado por el Centro Stile dirigido por Flavio Manzoni, el Ferrari F80 se esculpió dejando entrever un estrecho vínculo con el 499P, el hypercar dos veces ganador de Le Mans (2023 y 2024). Luce así unas enormes entradas de aire frontales en la parte inferior del difusor, una cabina muy centrada y envuelta por las puertas y los flancos, además de una zaga donde destaca su gran alerón y una salida de escape central.
Dicho alerón puede inclinarse en el ángulo de incidencia, así como elevarse y bajarse, potenciado su trabajo aerodinámico. Esto le permite al F80 disfrutar de hasta 1.050 Kg de downforce (460 en la parte delantera y 590 en la trasera) a 250 km/h.
El interior del F80 es una oda a la deportividad y al minimalismo. Partiendo de un avanzado chasis monocasco de fibra de carbono, Ferrari hace uso de unas espectaculares puertas con apertura estilo mariposa, para dar paso a un habitáculo 1+1, inspirado en el de un monoplaza y diseñado en torno al conductor.
Los asientos están escalonados longitudinalmente (con el pasajero más atrás) y también están diferenciados en cuanto a colores y materiales.
Cuenta con un gran cuadro de instrumentos digital repleto de información y muchos botones y diales físicos en el aro.
Su consola central tiene palancas de cambio como las que debutaron en el Ferrari Roma y una pequeña pantalla desde la cual controlar aspectos como la climatización.
A nivel motriz, el Ferrari F80 monta un esquema híbrido, donde el protagonista es un 3.0 V6 Twin-Turbo, capaz de desarrollar por sí solo 900 Hp. Su potencia específica de 300 Hp/litro, es una de las cifras técnicas más impresionantes, mientras que el par máximo es de 850 Nm a 5.500 vueltas.
Al motor térmico se une un propulsor eléctrico de 95 Hp y 45 Nm alojado dentro de la transmisión de doble embrague y 8 relaciones, enviando toda la potencia hacia las ruedas traseras. Este propulsor eléctrico es capaz de girar hasta las 30.000 rpm, sirviendo como KERS y apoyando al motor gasolina a la hora de demandar las máximas prestaciones.
Para el tren delantero se confía en dos motores eléctricos con 142 Hp y 121 Nm cada uno, pudiendo girar igualmente hasta las 30.000 rpm y estando gestionados por una nueva evolución del control vectorial de par.
La alimentación de todo el sistema híbrido corre a cargo de una batería de iones de litio con apenas 2,28 kWh, pero que trabaja a 860 voltios, pudiendo soportar picos de potencia de hasta 242 kW y corrientes de 350 A.
El resultado de este sistema de propulsión permite al Ferrari F80 hacer el 0-100 Km/h en apenas 2,15 segundos, el 0-200 Km/h en 5,7 segundos y alcanzar los 350 Km/h de velocidad punta.
Ferrari ha confirmado que del F80 serán fabricadas sólo 799 unidades para todo el mundo, cada uno con un precio de 3,6 millones de euros.