Randall Pitman protagoniza una bonita historia que ya muchos fanáticos de los autos quisieran contar como propia. Este anciano de 87 años y residente en Nova Scotia, en Canadá, puede jactarse de ser un hombre de una sola línea: por más de siete décadas ha conducido únicamente una camioneta Ford T fabricada en 1927 (un derivado del T que cumplió 111 años).
Pitman cuenta que compró el vehículo en un remate en el año 1949 (cuando ya el vehículo tenía 22 años). “Oferté US$ 45 al martillero y, como ellos hacen, preguntó ‘¿quién da 50?’”, relató el hombre a CBC. “Estúpidamente dije ‘US$ 47,5’ y él respondió de inmediato: ‘¡vendido!’”, agregó.
Setenta años después, Pitman sigue conduciendo su Ford T pick-up totalmente análoga. El modelo incluso es anterior a la estandarización de los frenos a la izquierda y el acelerador a la derecha. El vehículo tampoco cuenta con señalizadores ni menos aire acondicionado. Arranca el auto a mano y dice que sigue con energía para seguir haciéndolo.
A principios de este mes, Randall Pitman viajó a Crapaud, en la Isla Prince Edward (este de Canadá), a un encuentro de autos del ayer. Aunque ya ha conducido por miles de millas su Ford, esta vez lo envió en un camión. Así -dice- su preocupación es menor por rastrear el camión, que por conseguir repuestos en extremos del país, lo que a todas luces resulta un desafío difícil de conseguir. ¿Debería Ford premiar a Randall Pitman por su enorme fidelidad? Míralo como le da arranque a su particular vehículo que es más viejo que él mismo.