La dura competencia en el segmento de las camionetas en Estados Unidos, obliga a los tres grandes actores del segmento a innovar constantemente. Esta vez Ford -líder en ese disputado nicho- ha patentado el sistema de eje trasero direccional al estilo del Porsche 911, el Bugatti Chiron, el Bentley Continental GT o los Lamborghini Huracán EVO y Aventador SVJ. Esta característica permite que cualquier vehículo, independiente de su distancia entre ejes, se haga más fácil y rápido de maniobrar.
Este sistema, sin embargo, ha probado ser algo complejo y caro de implementar en autos de uso diario, como una pick-up (aunque GM lo intentó a inicios de la década pasada, con la tecnología Quadrasteer). Ahora la marca del óvalo azul vuelve a la carga y planea poner esta tecnología en sus camionetas de la F-Series.
Los croquis entregados en la United States Patent and Trademark Office, adelanta el nuevo diseño de tren motriz de las pick-ups de Ford, el cual consiste en un nuevo sistema electrónico montado en el diferencial del eje trasero, el que actúa con la geométria Ackerman que, a su vez, evita una pérdida de tracción o un desgaste disparejo de los neumáticos.
Esta no es primera vez que se ve una Ford de la Serie F con esta tecnología de eje trasero direccional. En 2017, la marca alemana ZF (conocida por sus cajas de cambio) presentó una F-150 prototipo cuyas ruedas traseras giraban, reduciendo el radio de giro en tres metros.
Respecto de la irrupción de General Motors en los ejes traseros direccionales, esta característica duró apenas cuatro años. En la práctica era algo demasiado caro, que bordeaba los US$ 7.500, que era caro de reparar e incluso poco fiable. Dos décadas después, las cosas pueden estar por cambiar.
Desde el interior de Ford, se remitieron a señalar que los patentamientos no necesariamente dan cuenta de que dicha invención vaya a estar en sus productos en el corto plazo.