Es cierto que Ford vive una progresiva retirada del segmento de automóviles, centrándose en cambio en las camionetas y vehículos familiares. Pero no por ello la firma estadounidense quiere alejarse de su espíritu más sport, presente desde siempre en el ADN de su portafolio. Ahora, Ford de Europa destapó al nuevo Puma ST, el crossover más juguetón y radical en el renovado abanico del Viejo Mundo. El modelo, del que ya se había adelantado el sonido de su motor tres cilindros, hizo como los deportivos más consagrados y en fase de desarrollo fue a limar su puesta a punto al célebre circuito de Nürburgring (ver nota). Después de todo, fue Ford Performance el departamento que timbró su acta.

El Puma ST en cuerpo de crossover compacto, está impulsado por un bloque EcoBoost 1.5 litros con turbo, que entrega 200 caballos y 320 Nm entre 2.500 rpm y 3.500 rpm. Se gestiona por una transmisión manual de seis velocidades tomada del Fiesta ST, aunque con una relación final acortada para permitirle una aceleración hasta los 100 km/h en 6,7 segundos. Con el pedal hasta el suelo, puede llegar a los 220 km/h.

Junto con la buena potencia que logra este pequeño propulsor, Ford saca lustre a las cifras de consumo. Es que el bloque tricilíndrico puede desactivar cualquiera de los tres pistones de cilindro, cortando la inyección cuando, por ejemplo, el auto está en ralentí, en velocidad crucero o el motor sencillamente no requiere trabajar con gran exigencia. La desconexión o conexión de cilindro se da en 14 milisegundos, tiempo 20 veces menor que un pestañeo. ¿En números? 14,5 km/l en régimen combinado.

“Los verdaderos entusiastas de la conducción no se van a conformar con menos emoción solo porque la vida exige un auto más ‘sensato’, por lo que nuestra prioridad número uno era que el Puma ST fuese tan estimulante y potente como cualquier modelo ST, sin sacrificar nada del espíritu práctico del Puma”, ha afirmado Stefan Münzinger, director de Ford Performance en Europa. “El resultado es un auténtico auto de performance disfrazado en un SUV chico; el Puma ST tiene el rendimiento y la precisión para estar codo con codo con las leyendas de Ford Performance”, agregó el ejecutivo.

¿Pero cómo se logra deportividad segura en cuerpo de crossover? La marca añade que la respuesta de la dirección es un 25% más rápida y los frenos un 17% más grandes que los del Puma estándar. Asimismo, el comunicado subraya que para compensar el centro de gravedad naturalmente más alto del vehículo (comparado con un hatchback o sedán) “la barra de torsión de la suspensión trasera se aumentó en rigidez a la torsión en hasta 2.000 Nm, un incremento de más del 40% en comparación con el Fiesta ST y del 50% en comparación con el Puma de serie”. También se agregó una barra estabilizadora delantera de 24 mm que contribuye a la estabilidad en curvas. Las llantas son de 19 pulgadas de serie.

El Ford Puma ST puede conducirse en cuatro modos: Normal, Eco, Sport y Circuito. A su vez, el control de estabilidad es configurable en tres escalones: intervención total, deslizamiento amplio con intervención limitada y desactivación total, el más sport pero donde el conductor es entero responsable de lo que sus habilidades le permitan.

Por dentro, si bien deportivo el Puma ST no descuida el confort. Dispone de un sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil central de 8″ pulgadas que muestra el logotipo de Ford Performance al arrancar y es compatible con Apple CarPlay y Android Auto. También está disponible -como opcional- un sistema de sonido B&O de alta fidelidad. La información relativa a la conducción se brinda al conductor mediante un panel de instrumentos digital de 12,3″.

¿Los asientos? De competición Recaro, aunque calefaccionados y con el logo ST. Hay protectores de piel para el volante y el pomo de la palanca de cambios, que, al ser manual, seguro tendrá trabajo.

El Ford Puma ST 2021 llega a los concesionarios de Europa justo para Navidad. ¡Qué buen regalo!