Se rumorea que Ford estaría en conversaciones avanzadas con Red Bull para dar su nombre a las unidades de potencia del equipo a partir de la temporada 2026. Lo que de ser cierto, marcaría el regreso de la firma del óvalo azul a la categoría reina.
La última vez Ford que participó en la F1 fue con el equipo Jaguar, de 2000 a 2004, y , con motores Cosworth. Desde entonces, la firma norteamericana ha centrado sus esfuerzos en otras categorías de competición, como el Campeonato del Mundo de Rallies y los sportscars.
Si bien Ford ha guardado silencio respecto de estas posibles negociaciones con Red Bull, sí ha dicho que considera poco inteligente no estudiar un posible ingreso en la Fórmula 1. Así lo señaló el jefe de Ford Performance, Mark Rushbrook, en declaraciones a nuestros colegas de Motorsport.com.
“La Fórmula 1 es ciertamente fuerte y está creciendo, tanto en los Estados Unidos como a nivel mundial. Lo que han hecho realmente bien es crear grandes carreras y una gran competencia. Todavía es el pináculo, pero han podido llegar a nuevas audiencias con cosas muy distintas, como ‘Drive to Survive’”.
“Como marca, competimos por la innovación, por la transferencia de tecnología y por razones de marketing. Todo ha cambiado y, definitivamente, requiere consideración. No comentamos sobre especulaciones, pero es nuestra responsabilidad estudiar y comprender cada serie y luego tomar decisiones sobre si tiene sentido competir allí o no”, agregó el jefe del deporte motor de Ford.
Uno de los puntos clave por los que Ford está mirando a la Fórmula 1, pero también la opción de desarrollar un prototipo LMDh para competir en la clase reina de la resistencia a partir de 2025, está en los pasos acertados que se han dado en cada disciplina, sin precipitar el salto a la movilidad eléctrica. La hibridación o el uso de combustibles sintéticos y sostenibles son pasos intermedios muy necesarios.
“El combustible sostenible es algo que nos interesa, pero que ya estamos utilizando también en otras series como el WRC, que lo tiene desde el año pasado. Los vehículos que vendemos están electrificándose a mayor o menor velocidad según cada región, por lo que queremos ser sostenibles no sólo produciendo vehículos eléctricos, sino también autos con motores de combustión más limpios”, concluye Rushbrook.