El Grupo Volkswagen acaba de publicar un video para mostrarnos de qué manera funcionan los frenos de los futuros vehículos de Bugatti. Esta especial demostración se centra en los sistemas de frenos elaborados a partir de la impresiones 3D.
Los componentes encargados de frenar los modelos de Bugatti, que hoy por hoy sobrepasan con largueza los 1.000 Hp, están hechos en base a carbono y cerámica, caracterizándose por su ligereza y alta resistencia. Las de este video, en cambio, son de titanio e incluso son más livianos (2,9 kilos) que los que monta el propio Chiron, que alcanzan los cinco kilos. El hiperdeportivo francés cuenta con discos de 420 mm adelante y 400 mm atrás.
Bugatti ha conseguido esta innovación gracias a un trabajo en conjunto con la Universidad de Tecnología de Hamburgo, una labor que llevó tres meses. La pinza de freno tiene 2.213 capas de polvo de titanio unidas durante 45 horas con la impresora 3D más grande del mundo. Cada una de ellas fue fundida con cuatro láseres de 400 voltios.
Lo positivo de este conjunto de frenos, es que, además, es capaz de enfriarse en cuestión de segundos -tal como muestra el video- evitando que los frenos pierdan eficacia en situaciones de alta exigencia.