Este 19 de octubre Latin NCAP cumplió 10 años de vida. La organización sin fines de lucro que testea la seguridad de los automóviles que se comercializan en América Latina y el Caribe, y que es parte de Global NCAP, celebró una década desde que presentó su primera tanda de impactos simulados, que involucró en ese entonces al Toyota Corolla, el Volkswagen Gol, el Peugeot 207, el Geely CK1, el Fiat Palio y el Chevrolet Meriva. Desde entonces, la entidad ha chocado más de 130 vehículos, de los cuales 24 probaron ser cero estrellas con nula seguridad para sus ocupantes (como el Chevrolet Spark GT de 2016, el viejo Chery Tiggo 3 o la actual Mitsubishi L200, entre otros). En el marco de los festejos, Latin NCAP recibió el saludo de Fundación Mapfre, que instó a endurecer la feble y anticuada normativa que rige en los países de la región.
Jesús Monclús, director de Mapfre, dijo que los vehículos más seguros podrían salvar la vida de decenas de miles de personas en los próximos años, como demuestra el reciente estudio de Bloomberg Philanthropies (es de hace un año y puedes revisarlo en detalle aquí) que analizó las realidades en Argentina, Brasil y Chile. “A pesar de ello, la respuesta de los gobiernos sigue siendo insuficiente. Los gobiernos, los gobernantes y los responsables de la seguridad de los vehículos deberían exigir pruebas Latin NCAP a todos los nuevos vehículos que salgan al mercado y deberían adoptar las normas técnicas de seguridad de los vehículos desarrolladas por Naciones Unidas”, dijo el experto. Enfatizo que “no hacerlo, significará más víctimas y más dolor en su consciencia y en la nuestra”.
Mapfre es uno de los socios fundadores de Latin NCAP. En Chile, recién este mes se estableció la obligatoriedad de sistema de frenos ABS para homologar (pero no para vender) vehículos livianos nuevos y en un año más ocurrirá lo mismo con el control de estabilidad, uno de los elementos que Bloomberg Philanthropies había puesto como un must de la seguridad activa de los vehículos. Latin NCAP desaconseja la compra de cualquier auto sin control de estabilidad.