La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos abrió una investigación a Volkswagen de Estados Unidos por el truco de marketing en el que dijo falsamente que cambiaría su nombre a “Voltswagen”. La información fue confirmada por un allegado de la institución a la agencia Reuters.
Fue el semanario alemán Der Spiegel el que informó por primera vez sobre la investigación y solicitud de antecedentes de la SEC (Securities and Exchange Commission) respecto de la mentira de fines de marzo. Volkswagen declinó comentar sobre el asunto y la SEC no respondió a una solicitud de comentarios de la propia agencia de noticias.
La compañía se disculpó después de emitir una declaración oficial falsa sobre el supuesto cambio de nombre, un truco que fue ampliamente criticado en las redes sociales. La falsedad provocó una indignación particular por tratarse de una empresa que ha estado trabajando para reconstruir la confianza pública después de su escándalo de trampa de emisiones de diésel.
El truco, que se produjo un par de días antes del Día de los Inocentes (el 1 de abril), una jornada en la que las empresas suelen publicar declaraciones de broma, tenía como objetivo llamar la atención sobre sus esfuerzos con vehículos eléctricos, explicó el fabricante.
Reuters y otros medios de todo el mundo -incluido este- informaron de la declaración que describía el cambio de nombre. El documento incluía una descripción detallada de los supuestos esfuerzos de cambio de marca de VW y los nuevos logotipos. Antes de continuar con la historia, los medios de comunicación le preguntaron a Volkswagen si el cambio de nombre era cierto, se les aseguró que sí, y al día siguiente VW emitió un comunicado de prensa e informes de redes sociales en los que describía el cambio de nombre, incluso citando al CEO de VW of America, Scott Keogh.
Al menos un analista escribió una nota de investigación alabando el cambio de nombre, mientras que en la bolsa de valores las acciones de la compañía subieron particularmente, un efecto claramente amparado en este hecho falso.
Keogh luego dijo a Reuters en una entrevista el 1 de abril que el anuncio del nombre falso era una “broma” y un intento de “tener algo de humor” y “celebrar nuestro profundo enfoque en la electrificación”.
Volkswagen admitió en 2015 haber utilizado software ilegal para manipular las pruebas de motores diésel, lo que provocó la mayor crisis corporativa de Alemania y le costó al fabricante de automóviles más de € 32.000 millones en multas, reparaciones y costos legales (también en Chile).
Fuente: Reuters.