En este último año, los mensajes de odio e incluso amenazas de muerte a figuras y personal de la F1, se han intensificado a través de las redes sociales. Tanto es así, que, por ejemplo, Nicholas Latifi contrató guardaespaldas tras su accidente en Abu Dabi, cuando luego de perder el control de su Williams, la dirección de la carrera debió sacar el auto de seguridad, cambiando por completo la carrera, lo que llevó a muchos aficionados de Hamilton a desahogarse con él por el resultado.

Recientemente, la comisaria de carrera Silvia Bellot fue víctima del abuso de las redes, cuando firmó la sanción contra Fernando Alonso en el GP de Estados Unidos. Entonces, el mismo piloto español salió al paso de los insultos recibidos en internet, diciendo que “este tipo de comportamiento es inaceptable tanto en el deporte como en la sociedad. Más cuando los comentarios van dirigidos a voluntarios de nuestro deporte”.

Pues bien, tras acontecimientos como los señalados, es que hoy la FIA se dará a la tarea de combatir la toxicidad de las redes. Mohammed Ben Sulayem, presidente de la organización, afirma que actos como estos tienen un efecto devastador en la salud mental. De ahí, que propone una serie de acciones, entre las que se cuenta una colaboración con el portal web Arwen.ai, expertos en inteligencia artificial, para detectar y erradicar contenido abusivo en sus propios canales.

Ben Sulayem también informa que en los próximos meses se lanzará una campaña conjunta con las 244 organizaciones automovilísticas adjuntas a la FIA, basándose en el trabajo de la iniciativa ‘Drive it Out’.

“Las pasiones son altas en el deporte, pero el acoso, el abuso y el discurso del odio no deben tolerarse. Todos en este deporte, desde medios de comunicación a equipos, pilotos, y aficionados, tienen un papel que desempeñar. No podemos ignorar esto. Insto a todo el ecosistema del automovilismo a tomar una posición.”, concluye el mandamás de la FIA.