Lexus RZ 450e se llama el primer vehículo de Lexus que fue desarrollado desde cero y sobre una plataforma específica para ser exclusivamente eléctrico. Primo hermano del Toyota bZ4X y el Subaru Solterra, es un paso firme de la compañía en objetivo de ser una marca 100% eléctrica para 2035.
El nuevo RZ 450e adopta el concepto de diseño “seamless E-motion”, que expresa la potencia y la aceleración fluida que caracterizan a los vehículos eléctricos a batería (BEV), destacando en el frontal un capó rebajado gracias a que no lleva ningún motor de combustión interna.
La parrilla de doble punta de flecha, que ha sido uno de los rasgos distintivos de Lexus, ahora toma un carácter tridimensional y se aplica a la carrocería del vehículo.
Los grupos ópticos, por su parte, forman una unidad con la carrocería Spindle Body. Son faros ultrafinos que enfatizan aún más el motivo en L de Lexus de las luces de circulación diurna, con la luz de carretera y los intermitentes menos prominentes.
Por el costado, el perfil lateral va ascendiendo hacia atrás, mientras que la parte posterior refuerza las cualidades de un todoterreno, donde destaca además el alerón posterior partido del techo y la barra de LED alargada que atraviesa la parte trasera.
Montado sobre la plataforma e-TNGA, lleva la batería integrada en el chasis, bajo el habitáculo, lo que le permite rebajar el centro de gravedad, redundando en mejoras de equilibrio, manejo y respuesta.
Esencia japonesa en el interior
El interior del Lexus RZ 450e representa una evolución del concepto japonés Tazuna, que conjuga la posición del conductor al volante y la disposición precisa de los indicadores, controles y pantallas para crear un espacio donde baste con pequeños movimientos de las manos y los ojos para conducir el vehículo. El principio se inspira en los pequeños ajustes de las riendas que aplica un jinete para controlar a su caballo, que es el significado de “Tazuna” en la lengua nipona.
De esta manera, la disposición de los indicadores, el visor frontal y la pantalla multimedia de 14′' se ha optimizado, y el cuadro de instrumentos se ha colocado más abajo para mejorar la línea de visión frontal del conductor. La consola central incorpora un nuevo mando giratorio para el sistema shift-by-wire, que refleja la simplicidad general del diseño.
Otras novedades llamativas en el interior son el techo panorámico con regulación de la intensidad luminosa y un sistema de calefacción radiante.
El techo panorámico con regulación de la intensidad luminosa y protección térmica resalta la sensación de amplitud en el habitáculo. El cristal cuenta con un revestimiento –low-e– que refleja la radiación infrarroja y atenúa el calor radiante en días soleados, conservando el calor dentro del habitáculo cuando fuera hace frío. El techo cuenta asimismo con una función de regulación eléctrica de la intensidad luminosa, que, con un sencillo control táctil, alterna al instante entre transparente y opaco, para así bloquear la luz solar directa.
Como consecuencia de ello, resulta menos necesario usar el aire acondicionado para mantener una temperatura confortable, y no hace falta un parasol retráctil, lo que reduce el peso en la parte superior del vehiculo.
La calefacción radiante, por su parte, es un nuevo sistema a la altura de las rodillas frente al conductor y el pasajero delantero, bajo la columna de dirección y el cuadro de instrumentos inferior.
En combinación con los asientos y el volante calefactados, ayudan a subir más rápidamente la temperatura del conductor y del copiloto y dan la sensación de tener una manta caliente sobre las piernas. Ideal para días fríos, permitiendo que el conductor adquiera una temperatura corporal agradable de forma más rápida.
En cuanto a temas mecánicos, la autonomía bordea los 360 kilómetros, dispone de tracción total y el tren motriz combina un motor eléctrico delantero de 150 kW con un motor trasero de 80 kW para un total combinado de 230 kW (poco más de 308 Hp), lo que es un salto grande frente al Toyota bZ4X y Subaru, los cuales llegan hasta 215 Hp.