Un problema gigante a nivel global es el de los siniestros viales. Las cifras son realmente aterradoras, de hecho, según datos entregados por Conaset, los traumatismos ocasionados por siniestros viales son la principal causa de muerte de niños y adultos jóvenes de 5 a 29 años. Se estima que 500 niños mueren diariamente en siniestros de tránsito evitables, cada 24 segundos hay una muerte en las vías, y cada 4 minutos un niño involucrado.
Son números que deben caer a su mínima expresión. Para eso, existen diversos planes y programas que buscan atacar esta verdadera pandemia y con el objetivo de prevenir la ocurrencia de siniestros viales en los inmediaciones de los colegios y jardines infantiles, Automóvil Club de Chile oficializó la puesta en marcha del programa mundial de seguridad vial infantil “Star Rating for School”, iniciativa de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), que evalúa los peligros que existen en los perímetros cercanos a las escuelas y ejecuta una serie intervenciones y soluciones viales que logren crear entornos escolares seguros para los estudiantes.
Este proyecto internacional - que está presente en 52 países y que ha logrado beneficiar a más de 900 escuelas en todo el mundo- busca que los establecimientos educacionales tengan la oportunidad de implementar gratuitamente una serie de medidas de mitigación en el ámbito de la seguridad vial que les permita minimizar la ocurrencia de atropellos e incidentes viales que pueda verse involucrada su comunidad escolar, tomando como punto de partida los viajes que se realizan desde y hacia sus escuelas.
Según explica María Ignacia González, directora ejecutiva de Automóvil Club de Chile, “Chile tiene una gran deuda con la seguridad vial infantil, más aún cuando en la última década cerca del 37% de los niños, niñas y adolescentes que fallecieron en las vías eran peatones. Este proyecto no sólo evalúa y comunica los peligros a los que está expuesta una comunidad escolar, sino que también le entrega soluciones rápidas y efectivas a los establecimientos y a las comunas donde están insertas para que existan radios urbanos capaces de garantizar una movilidad segura para niños y adultos”.
La ejecutiva agrega que “para realizar las intervenciones, primero se evalúan las características y atributos de la zona escolar, como el flujo vehicular, velocidades, iluminación, cruces peatonales, señaléticas, demarcaciones y otros elementos de la infraestructura que pueden poner en riesgo la seguridad de quienes se desplazan diariamente en el lugar. Una vez que se pesquisan estos peligros, la información se envía a Inglaterra, donde analistas identifican las soluciones más efectivas y apropiadas para el lugar, para así dar paso a la implementación de las mejoras viales. Este proceso puede durar en total entre dos y tres meses, y no tiene ningún costo para los colegios ni para las comunas”.
El plan arranca en Lo Espejo
En el marco del Pacto Nacional por la Seguridad Vial, Conaset con el apoyo de las empresas 3M y Automóvil Club de Chile está implementando mejoras en entornos escolares ubicados, inicialmente, en las comunas de Lo Espejo, Maipú y Puente Alto, en la Región Metropolitana, como parte de un proyecto para implementar 200 mejoramientos en otros establecimientos a lo largo del país, en cinco años.
El primer paso con un plan piloto del programa “Star Rating for School” se inició en Lo Espejo, comuna que tiene una tasa de 116 siniestros cada 100 mil habitantes, motivo por el cual se intervendrán los entornos de 16 establecimientos públicos.
El colegio elegido fue la escuela Hernán Olguín Maibeé, ubicada sobre la avenida Cardenal Silva Henríquez, principal arteria de la comuna, y al lado del jardín infantil Mapu Weñe.
El proyecto será ejecutado por Automóvil Club de Chile, buscando identificar las situaciones de peligro al que están expuestos los menores de edad en sus entornos escolares, para así implementar diferentes soluciones viales que prevengan atropellos e incidentes de tránsito en colegios y jardines.
Con una inversión cercana a los US$ 20 mil, y gracias a la coordinación técnica de la Conaset, en tres meses de trabajo se crearon nuevos pasos peatonales, se habilitó como peatonal el pasaje Pegado que estaba siendo usado mayoritariamente para el tránsito de vehículos, se instalaron postes en las inmediaciones que permiten controlar el acceso de entrada y salidas de estudiantes, y se distribuyeron zonas recreacionales y de descanso para quienes transitan habitualmente por el entorno escolar.
La intervención consideró la instalación de mobiliario y señaléticas para mejorar la seguridad de peatones, estudiantes, apoderados y cuidadores, además de pintura y la instalación de toldos permanentes.
Según las proyecciones de Automóvil Club de Chile, al término del primer semestre se espera intervenir a lo menos seis establecimientos educacionales de la Región Metropolitana, y durante la segunda mitad del año la intención es que esta iniciativa internacional logre expandirse a regiones, principalmente en aquellas comunas que presentan altos índices de siniestralidad vial.
“La gran ventaja de este programa es que es sostenible en el tiempo. No sólo mide el nivel de seguridad antes de la intervención, sino que también se hace después de haber ejecutado las mejoras viales, lo que permite al colegio y a la comuna monitorear en el tiempo si los cambios introducidos están cumpliendo su objetivo y/o si deben modificarse en algún momento. Si queremos que este tipo de iniciativas crezcan y se validen en Chile se requiere del compromiso tanto del sector público como del privado. Así es como este programa ha podido ser exitoso internacionalmente”, dijo María Ignacia González de Automóvil Club.
Las próximas intervenciones de seguridad vial se realizarán en el Colegio Las Vizcachitas y en el Jardín Pequeños y Pequeñas Artistas, ambos de la comuna de Puente Alto.