Este lunes llegó al país el primero de tres aviones que traerán los monoplazas, baterías, llantas y generadores del campeonato de la Fórmula E. El cargamento que aterrizó en la losa del Aeropuerto Arturo Merino Benítez es el primero de un total que se cifra en más de 500 toneladas para el Santiago ePrix. A modo de ejemplo, cada auto pesa 900 kilos, más 385 kg. de la batería.
A lo largo de la temporada, la empresa DHL se encarga de llevar el aparataje del campeonato a las 12 ciudades anfitrionas, lo que a la larga equivale a unos 70 mil kilómetros de distancia. La carga se mueve de ciudad en ciudad, es decir, hasta ahora se ha trasladado desde Riad a Marraquech y desde esa urbe del norte de África hasta Santiago.
La empresa aclara que la logística es de carácter multimodal, es decir, que "cuando las distancias y los horarios lo permiten, utilizamos el transporte por mar, carretera e incluso ferrocarril para hacer que nuestra logística sea lo más sostenible posible". La compañía alemana intenta así impactar lo menos posible en el medio ambiente, para ir en la línea con la idea que pretende instalar la Fórmula E.