Los autos del “Chino” Ríos: de un Opel Corsa a un Lamborghini Huracán STO

Un nuevo gusto se dio Marcelo Ríos. El ex número del uno mundo dio a conocer en su cuenta de Instagram la adquisición que le acaba de llegar, señalando “Al fin llegó la bestia morada”.

La referencia del controvertido personaje es nada menos que un Lamborghini Huracán STO, una de las máximas referencias en cuanto a deportividad, creado para honrar los éxitos deportivos y “con el único objetivo de ofrecer toda la emoción y la tecnología de competición de un auténtico auto de carreras en un modelo legal de carretera”, dicen en la propia marca italiana.

Pero el Lamborghini Huracán STO es solo un capítulo más en el romance de Ríos con los autos deportivos.

A continuación te recordamos los principales vehículos que se han visto con el zurdo de Vitacura desde que asomó como una de las mayores promesas del tenis y cuando levantaba a buena parte de los chilenos a ver sus partidos.

Cuando Marcelo Ríos estaba comenzando a levantar y a conseguir sus primeros éxitos deportivos, fue auspiciado por General Motors, grupo que por esos años tenía bajo su alero a la marca alemana (hoy en manos del Grupo Stellantis). En esa época tuvo un Opel Corsa GSi de 3 puertas , auto alemán que sería denominado como el oficial del tenista chileno.

Según crónica de VeoAuto.cl, el Opel Corsa GSI se estrenó en Chile en el 1er Salón del Automóvil, en octubre de 1993. Pero antes del destape, se entregaron 9 unidades, una de ellas en color negro a Marcelo Ríos.

El Corsa GSi tenía un motor 1.6 de 109 caballos, capaz de alcanzar los 195 km/h y acelerar de 0 a 100 Km/h en 9,5 segundos. Como detalle, el compacto de origen español tenía de serie frenos ABS.

Marcelo Ríos también tuvo un Chevrolet Astra cuando tenía su alianza con General Motors. Eso sí, el Astra del “Chino” era bastante especial, ya que se trataba de la versión Cabriolet y fue uno de los primeros en llegar al país con esa configuración.

Como anécdota, años más tarde Nicolás Massú contaría que ese Astra Cabrio fue a sus manos. “Yo cumplí 18 años y me acuerdo que mi primer auto fue un Opel Astra Cabriolet, que era del Chino Ríos. Él lo usó un tiempo... tenía contrato con esa marca, Chevrolet, y después él lo entrega, le pasan otro y ese automáticamente pasa para mí”, contó Massú en el programa Domingos Dominicales.

Único en Chile en esa época. Estaba equipado con un motor V8 5.7 capaz de generar 350 caballos de potencia. Además contaba con una eficiente caja de seis velocidades. Fue el primer purasangre que de Ríos, abriendo una puerta que nunca más cerraría.

El Cavallino Rampante no podía estar ausente en la vida del ex tenista y así fue como también formó parte de la colección de autos. El deportivo que estuvo en las manos de Ríos fue un 360 Spider, modelo que llevaba un motor V8 de 3.6 litros, capaz de generar 400 Hp, potencia que le permitía pasar de 0 a 100 km/h en 4.2 segundos con una velocidad máxima de 300 km/h.

No solo de deportivos vive el garaje de Ríos. Tal como se pudo ver en una entrevista que concedió a la televisión, el “Chino” tenía una monstruosa Ford F-150 Raptor de color blanco.

Una de las adquisiciones más bulladas del zurdo de Vitacura. El deportivo inglés por esos años tenía un costo cercano a los $ 180 millones y se movía por un motor V8 de 3.8 litros Twin-Turbo. Correspondía al primer modelo de la gama Sport Series y entre sus especificaciones se anotaba una velocidad máxima de 328 km/h, paso de 0 a 100 km/h en 3,2 segundos y de 0 a 200 km/h en apenas 9,5 segundos, cifras que conseguía gracias a un chasis de fibra de carbono MonoCell II y una carrocería que es mayoritariamente de aluminio.

Este deportivo británico fue con el que tuvo un siniestro vial en la Costanera Norte, por suerte, sin lesionados, en 2017.

Hace dos años, el “Chino” hizo noticia con un radical Lamborghini, al que presentó en sus redes sociales señalando “Porqué (sic) a la gente le gusta mostrar las cosas que tiene, en mi caso es porque me siento orgulloso de poder tener las cosas que me gustan (autos) gracias al esfuerzo que pongo todos los días en las cosas que hago, pero es muy común y a veces molesta”.

Los comentarios no se hicieron esperar. Desde el motociclista Matías Horta, quien le escribió “Buenos cáliper, color pelota de tenis!!” al actor nacional Cristián de la Fuente, quien le comentó “Préstamelo cuando vaya a Miami en agosto!!!”, ante lo que el ex número uno le respondió “con mucho gusto”.

Un detalle, que volverá a repetir, es que tenía el detalle de tener una patente personalizada que dice “MRIOS”.

El Huracán EVO se movía con un motor V10 de 5.204 cc que desarrolla 630 caballos de fuerza y un torque de 600 Nm, asociado a una caja de doble embrague de siete marchas y tracción integral. Así, era capaz de ir de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y llegar a una velocidad máxima de 325 km/h.

Con este modelo, Marcelo Ríos ha enfrentado problemas con la justicia en Estados Unidos, puesto que, en nota publicada en La Tercera, un vecino del barrio en el que reside el chileno denunció que “Para aquellos que se preguntan sobre el extremadamente ruidoso Lamborghini Huracán blanco (con pinzas de freno de color verde brillante) que ha estado usando nuestro vecindario como pista de carreras durante el último mes y medio, el propietario es el Sr. Marcelo Ríos”

El más potente de la familia del deportivo estadounidense que, gracias a un ocho cilindros –de código LT5- de 6.2 litros desarrollaba 755 caballos de fuerza, asociado a una caja automática de 8 marchas con levas al volante. Tal como con el nuevo Lamborghini Huracan Evo, tenía la patente personalizada “MRIOS”, la cual agregaba una bandera de los Tampa Bay Bucanneers, el equipo de la NFL que representa al estado de Florida.

El primer eléctrico que se le conoció al “Chino”. Se trata de un modelo con puertas estilo “ala de gaviota”, un SUV familiar que estaba equipado con dos motores (uno en cada eje) acoplados a una caja reductora de una sola velocidad cada uno. Con tracción integral, dependiendo de la versión podía desarrollar desde 525 Hp, con una autonomía desde los 320 kilómetros.

El modelo más reciente del “Chino” Ríos. El Lamborghini Huracán STO es una verdadera obra de ingeniería que desde su motor V10 de 5.2 litros aspirado desarrolla 640 CV y acelera de 0 a 100 km/h en 3 segundos, con una velocidad máxima de 310 km/h.

En su estética se aprecia toda la radicalidad de la firma de Sant’Agata, con un dibujo que se inspira en el Super Trofeo EVO, pero con un diseño que optimiza la aerodinámica y usa más de un 75 % de fibra de carbono en los paneles de la carrocería.

La unidad que luce Ríos es de un llamativo color Viola Pasifae que pertenece a la pintura Sportiva de la firma italiana. A eso le agregó un Verde Selvans como contraste con el sticker STO en la puerta lateral. Las pinzas de los frenos carbonocerámicos también son de color verde.

Y como ya es una constante en los autos del “Chino” Ríos, la placa patente de Florida también es personaliza con la palabra “MRIOS” con la misma bandera del equipo de la NFL, los Tampa Bay Bucanneers.