Los SUV son el segmento más vendido en el país llegando a las 189.473 unidades en 2022 con un crecimiento del 8,7% en comparación al 2021. En Europa el escenario es bien parecido, estos vehículos representan cerca del 50% de las matriculaciones nuevas. Sin dudas, números que llaman la atención más aún si Vincent Cobée, director general de Citroën en declaraciones a Autoexpress señaló que este segmento llegaría a su fin por los vehículos eléctricos.
Quizás las declaraciones del CEO de la firma gala no se condicen con la realidad que está viviendo la industria, ya que las estadísticas demuestran el dominio de este segmento en gran parte del mundo. Sin embargo, él mismo admite al sitio web Autoexpress que “los números no me dicen que tengo razón” pero no teme en decir que “el mundo de los todoterrenos está acabado”.
Los argumentos que fundamenta Cobée apuntan a que las ventajas que comúnmente conocemos de los SUV que son su posición de manejo más elevada y buena habitabilidad, son factores determinantes que comprometen la aerodinámica del vehículo, elemento fundamental de los vehículos eléctricos.
Bajo este mismo argumento señala que “En un vehículo eléctrico, puedes pagar un precio muy alto si tu aerodinámica no está bien. Hay unos 50 kilómetros de diferencia entre una buena aerodinámica y una mala. Entre un SUV y un sedán, puedes estar hablando muy fácilmente de 60, 70 o 80 kilómetros”.
Lo que empezará a ocurrir, según el mandamás, es que muchos de los vehículos que son un poco más altos se declararán SUV para tener mayor éxito, ejemplo de ello es el nuevo Citroën C4 X. Este modelo fue presentado en junio y según la marca tomará lugar entre el nuevo C4 y el C5 X, cuenta con un diseño elegante y cuenta con esta combinación de carrocería de fastback y la actitud moderna de un SUV.