Proclamado este domingo en Japón pentacampeón del mundo de MotoGP con solo 25 años, el piloto español Marc Márquez tiene todo el futuro por delante para seguir sumando récords en su deporte. El más joven campeón de la historia en la categoría reina, dotado de un talento fuera de lo común desde sus inicios sobre las dos ruedas, cuenta con la mayoría de los récords de precocidad.
El quíntuple campeón más joven en MotoGP, igualó el palmarés del australiano Mick Doohan, quien le define como "simplemente extraordinario". Solo los italianos Valentino Rossi y Giacomo Agostini lo superan con siete y ocho coronas en la élite del motociclismo de velocidad.
El récord de poles en la categoría reina sigue en manos de Doohan (58), aunque Márquez se le acerca con 50. El catalán tampoco pierde de vista las 89 victorias y 166 podios de Rossi ni los trece títulos de su compatriota Ángel Nieto (seis en 50 cc y siete en 125 cc).
Márquez logró, además, la corona de Moto 2 en 2012 y el título de 125 cc, en 2010. Vista su progresión, los 15 títulos entre todas las categorías de la leyenda italiana Giacomo Agostini no parecen tanto una entelequia. "Márquez es único, y a día de hoy es el mejor", asegura el español Alex Crivillé. "Su horizonte no tiene límite, podría incluso soñar con el récord de Agostini", afirma el campeón del mundo en 1999.
Y eso que Agostini y Nieto competían en dos categorías a la vez, lo que les permitió conformar más rápido sus palmarés.
Siempre al límite
"Márquez es tan joven que si sigue así puede lograrlo", piensa 'Ago', ganador siete veces en 350 centímetros cúbicos y ocho en 500 cc entre 1966 y 1975. "Es difícil hacer comparaciones entre épocas, cada campeón es diferente", estima el antiguo piloto de 76 años.
Márquez se beneficia de mejores neumáticos y de circuitos y componentes más seguros. Ello le permite pilotar siempre al límite, lo que le acarrea muchas caídas, pero sin sufrir apenas daños físicos.
El catalán se fijó la meta para 2018 de acabar menos veces con sus huesos sobre el asfalto, aunque en este caso no se puede decir que cumpliera su reto. En la temporada en curso es también el líder en irse al suelo, con 18 caídas, aunque la mayoría en las clasificaciones. Como comparativa, en Yamaha, Maverick Viñales solo se fue al suelo en dos ocasiones, mientras que Rossi cayó cinco veces.
Márquez descarta no obstante cambiar su estilo de pilotaje o ser más prudente. "Seguimos al cien por cien", suele repetir. "Ello me permite tomar puntos de referencia para, una vez en carrera, saber cuáles son los límites que no hay que rebasar", explica sobre esta estrategia tan arriesgada como efectiva.
Después de su dura caída en Malasia en 2011 la suerte lo ha acompañado.
Motivación y suerte
"Es muy bueno que no haya tenido lesiones graves por el momento", asegura Freddie Spencer, campeón en 1983 y 1985 en la categoría reina, y cuya carrera se vio lastrada por problemas físicos y lesiones. "Hay dos factores desconocidos: cuánto tiempo durará su motivación y su suerte", subraya.
Pero a partir de ahora, en cuanto a rivalidad interna no encontrará el camino tan despejado. Su compatriota Dani Pedrosa, quien desde hace tiempo dejó de ser un rival por el título, abandonará la competición y lo sustituirá el también español Jorge Lorenzo, con el que Márquez no mantiene la mejor relación. Su pilotaje, juzgado a veces de temerario, enturbió su relación con su antaño idolatrado Rossi, y le costó escuchar pitos procedentes de los numerosos aficionados de 'El Doctor'.
Rossi, cuyo último título data de 2009, podría retirarse a finales del 2020, dejando a Márquez como único capo de la parrilla. Viñales aún no ha cumplido con las expectativas que despertó. El regreso del australiano Casey Stoner, laureado en 2007 y 2011, es aún una hipótesis, y su rendimiento una incógnita.
Así que quizá hay que mirar a medio plazo para encontrar a los prometedores españoles Arón Canet, Joan Mir, Alex Rins y Jorge Martín, o a los italianos Franco Morbidelli, Francesco Bagnaia, Marco Bezzecchi y Fabio Di Giannantonio.
Su hermano pequeño Alex, de 22 años, que seguirá un año más en Moto2, y con el que Marc cohabita todavía junto a sus padres, aún parece estar tierno para esas lides.
Fuente: Agencia AFP.