Lo anunciamos hace un mes. Mazda tenía fecha de estreno para su primer SUV hibrido enchufable, lo que marcaría un hito muy importante en la historia de la marca. Ese día llegó para la compañía fundada en Hiroshima, develando el esperado CX-60, modelo que además se convierte en el más potente en serie desarrollado por los japoneses.
El Mazda CX-60 es un SUV mediano y según Joachim Kunz, responsable de Desarrollo de Producto e Ingeniería de Mazda Europa, es " un punto de inflexión”, puesto que es un claro paso hacia el objetivo de posicionarse en un segmento premium donde dominan las marcas alemanas.
El nuevo modelo cuenta con el lenguaje de diseño KODO, pero con un frontal más largo y con una zaga más corta, aspecto que obedece al uso de la nueva plataforma Large Platform, que permite que ocupar motores en posición longitudinal, ofrecer tracción trasera y electrificación en distintos niveles.
El modelo, que mide 4,75 metros de largo; 1,89 de ancho y 1,67 de alto, se anuncia como un vehículo con una carrocería rígida, con un centro de gravedad bajo, un tren trasero multibrazo y una gran capacidad de carga de 570 litros. Además, tiene como gran novedad la versión híbrida enchufable, tecnología que Mazda denomina nombre e-SKYACTIV PHEV.
Este sistema combina un motor a gasolina SKYACTIV-G de 191 caballos con una unidad eléctrica de 136 caballos que se alimenta de una batería con 17,8 kWh de capacidad, que puede ofrecer entre 63 y 68 kilómetros máximos de autonomía eléctrica y que se recarga en cuatro horas (a 7,2 kW).
La potencia total conjunta del nuevo CX-60 es de 327 Hp con un par de 500 Nm, lo que, como les mencionamos anteriormente, le permite pasar a ser el Mazda en serie más potente de la historia (además del primer plug-in hybrid).
La caja asociada al motor es automática de ocho velocidades, cuenta con tracción total i-Activ AWD y es capaz de alcanzar los 100 km/h en 5,8 segundos.
Junto a la inédita versión híbrida plug-in se anunció opciones con motores a gasolina (3.0 litros) y turbodiésel (3.3 litros), los cuales entrarán al mercado a finales de año.
Ambas opciones podrán combinarse con propulsión trasera o tracción integral, dejando al híbrido plug-in siempre con tracción en ambos ejes, aunque podrá disponer de reparto variable.
En cuanto al interior, dispondrá de elementos de vanguardia, entre las que destacan las dos pantallas digitales digital de 12,3′' cada una, complementado con conectividad inalámbrica y sistema de sonido Bose con supresión de ruido.
Otros aspectos para resaltar van por el lado de la seguridad. En este caso, cuenta con lo que la marca denomina “guiado automático de posición al volante”, un sistema que establece automáticamente la posición ideal para cada conductor.
Para esto, se debe introducir la altura de la persona y, con la ayuda de una cámara de reconocimiento fácil que revisa la posición de los ojos, ajusta los asientos en altura y profundidad, además del respaldo y la columna de dirección, los retrovisores exteriores y el head up display para que adoptemos la mejor postura al volante.
Sobre avances en dinámica, Mazda informó que el CX-60 tendrá menor balanceo en curvas gracias al frenado selectivo de la rueda interior trasera (Kinematic Posture Control) mientras a la hora de estacionar marcha atrás, debutará una nueva cámara llamada “see through view” que hace invisible la zaga del coche durante la maniobra para una facilitar la maniobra y poder ver elementos que puedan dañar el vehículo.