El legado de Niki Lauda nunca será olvidado, menos aun por Mercedes Benz, cuyo impacto como asesor fue decisivo en la escudería alemana durante sus años dorados entre 2014 y 2021, siendo en parte responsable del fichaje de Lewis Hamilton.

Por eso y mucho más, hoy el constructor alemán ha renombrado la calle de entrada a su sede en Brackley, que desde hoy pasa a llamarse Lauda Drive. Homenaje que se suma al de la inclusión de una estrella roja en los laterales del monoplaza, color identificativo del piloto austriaco por sus cascos y sus gorros.

“Es un verdadero honor presentar Lauda Drive y fue genial ver a tantos miembros del equipo reunirse para ver la revelación”, se congratula Toto Wolff, director del equipo e impulsor del detalle, que ha ornamentado el letrero con una de las gorras de Niki.

“Si bien nuestro querido amigo y colega Niki no hubiera querido que hiciéramos un escándalo, también estaría orgulloso de que esta carretera lleve su nombre. Fue un privilegio para todos nosotros trabajar junto a él y tuve la suerte de llamarlo uno de mis mejores amigos”, recuerda el mandamás.

En este año complicado para Mercedes, desde la escudería recuerdan a Lauda como una de las figuras determinantes a las que haber recurrido: “Fue un gran contribuyente a nuestro éxito, un gran compañero de entrenamiento para mí y un fuerte presidente no ejecutivo, a quien extrañamos mucho. Desearía que todavía estuviera aquí como mi amigo y como presidente, porque hubiera habido muchas preguntas que me hubiera gustado hacerle este año”, lamenta Wolff, que pese a todo sigue sintiendo la presencia del expiloto:

“Su legado sigue vivo en tantas formas y formas, pero saber que tantas personas pasarán por Lauda Drive en los años venideros es muy especial”, finaliza Wolff en el comunicado oficial del equipo.