A fines de febrero, a solo días de inaugurar su 90º edición, el Salón de Ginebra anunció su definitiva cancelación ante el rápido avance del coronavirus. Fue una decisión dura (aunque acertada a la luz de los hechos) pues las marcas ya tenían todo montado, sin embargo, la prohibición de eventos masivos por parte de las autoridades locales le pusieron la definitiva lápida a la tradicional cita. Se pensaba que en 2021 Ginebra volvería a brillar con luces propias, pero nada de eso ocurrirá y tampoco habrá salón en marzo del siguiente año.
Los organizadores lo hicieron oficial este martes y adujeron como motivo principal la decisión de varios fabricantes de no asistir a una eventual muestra en 2021. El Salón de Ginebra habría hecho un catastro en el que se constató que el interés era muy bajo y que, por contrapartida, la mayoría del sector esperaba volver a fortalecerse financieramente para regresar en 2022.
“El sector de la automoción se encuentra actualmente en una fase difícil y los expositores necesitan tiempo para recuperarse de los efectos de la pandemia. Además, no es seguro que la situación sanitaria actual permita la organización de un evento que atraería a más de 600.000 visitantes y 10.000 periodistas la próxima primavera”, publicó en un escrito la organización de la exposición helvética.
La pregunta ahora es si verdaderamente habrá un Salón de Ginebra edición 90 años. Nadie podría asegurarlo y por ahora lo único cierto es que habrá que acostumbrarse a los eventos privados... Al menos en el corto y mediano plazo.