La electromovilidad es un tema que poco a poco empieza a abarcar a todos los sectores del transporte terrestre nacional. A la gran cantidad de buses que se han sumado al parque de la Región Metropolitana y el incremento de la oferta de vehículos eléctricos, las motos no quieren quedarse atrás y también buscan convertirse en una alternativa ofreciendo como ventajas el menor gasto económico y la disminución de emisiones contaminantes.

Es el compromiso, por ejemplo, de la marca de motos eléctricas NIU. La firma de origen chino nació en 2018 y es representada en Chile por E Mobility y aunque ya comercializaba unidades hace un par de años a través de concesionarios y de manera online, ahora estrenó su primer local físico en Santiago, en una instalación ubicada en Vitacura que cuenta con más de 220 metros cuadrados, donde exhibe desde las motos a scooter monopatín y, a fin de año, bicicletas.

La compañía, que ya ha vendido cerca de 400 unidades en Chile, está presente en 48 países, incluyendo las principales capitales del mundo. Además, por estos días completará más de 10.000.000 billones de kilómetros recorridos por sus usuarios.

La oferta de motocicletas es de seis modelos, con precios que van desde $ 1.399.000 (modelo NIU Gova 03) a $ 3.299.000 (NIU MQi GT y la NIU NQi GTS Sport), los cuales varían por dimensiones y capacidad de la batería y kilómetros que puede recorrer hasta necesitar una nueva recarga. La más potente incluso cuenta con dos baterías y permite moverse hasta por 100 kilómetros.

La gran ventaja de estas motocicletas, pensadas para la ciudad y para desplazamientos que no superen los 50 km diarios en promedio, pasa por la nula contaminación que generan al no tener un motor térmico y por el enorme ahorro que se puede hacer.

Según Felipe Gutiérrez, gerente general de la marca en Chile, “ni siquiera el transporte público se le acerca. Andar en bicicleta y caminar es lo único más barato”

Tal como señalan en la compañía, con una carga de $250 un usuario puede circular hasta 100 kilómetros, por lo que el gasto anual es de apenas $ 36.000 en energía, frente al millón de pesos que se supera en un automóvil en regímenes similares.

Fuente: e mobility

Al ahorro que se hace por no gastar combustible se suma el de las mantenciones. Al tenr pocas piezas mecánicas, no requieren revisión continua y el único lubricante que usan es el líquido de freno.

El sello de las motos NIU

NIU comenta que sus productos responden a las exigencias de los usuarios actuales en las pobladas ciudades, permitiendo desplazamientos rápidos, manteniendo siempre la conectividad.

Es tal la relevancia de este punto que NIU se considera una empresa de tecnología y no de transporte, por lo mismo, las motos tienen un computador y llevan integradas un chip con internet que se conecta a la nube y de ahí, al teléfono celular del propietario.

“A través de una aplicación, los usuarios pueden hacer trazabilidad y planificación: revisar rutas de GPS, repasar los trayectos realizados y conocer la carga de la batería”, comenta Gutiérrez.

Otro factor diferenciador es el autodiagnóstico, donde la plataforma también indica los problemas que pudiesen presentarse, revisando el sistema electrónico y detectando fallas de manera autónoma. También indica de la energía que tiene la moto y la autonomía restante.

A la hora de cargarla, basta conectarse a una toma corriente convencional de 220v. Lo interesante en este caso es que la moto puede enchufarse o bien se puede desmontar la batería para llevarla a cargar a otro lugar. Por ejemplo, si en el estacionamiento de un edificio no existen puntos de carga, se saca la batería y se carga en la casa de manera simple, puesto que pesa cerca de 10 kilos y tiene el tamaño de una caja de zapatos. “Se enchufan en todos lados. Puedes ponerlas a cargar mientras te tomas un café, mientras estás en la oficina, o descansas en tu casa”, comenta el ejecutivo sobre la batería que demora seis horas en alcanzar el 100% de carga.

La facilidad que ofrecen al manejar es otro punto que destacan en NIU Chile. “Son motos muy fáciles de conducir, ya que no tienen cambios ni embrague, por lo que son aptas para todo tipo de público. Jóvenes, hombres y mujeres, y también personas mayores”, dice el gerente de NIU.