Un doble anuncio fue el que hizo Volkswagen de Brasil esta semana. La filial de la compañía alemana informó que alcanzó el hito de las 200 mil unidades del SUV T-Cross producidas en la planta São José dos Pinhais, Paraná, pero además confirmó que le ha puesto la lápida al veterano Volkswagen Fox, como una manera de descomprimir las operaciones para dar precisamente más cabida a su best seller familiar.
“Desde su lanzamiento en 2003, el Volkswagen Fox se ha producido exclusivamente en la planta de Paraná y durante estos 18 años se ha consolidado como un modelo muy querido por los empleados y deseado por los clientes. El T-Cross sigue el mismo camino y es un orgullo ver un producto de nuestra planta convertirse en un éxito de ventas en Brasil y en el exterior”, dijo Leandro Lemos de Oliveira, gerente de la planta de Volkswagen en São José dos Pinhais.
Desarrollado en Brasil, se produjeron más de 1,8 millones de VW Fox, de los cuales 1,3 millones permanecen en Brasil y unos 500 mil se comercializaron en países de la región. “Fue el primer modelo de la marca en utilizar el motor de tres cilindros 1.0 12V Total Flex y adoptar la transmisión manual de seis velocidades, por ejemplo, reforzando su ADN pionero en el segmento”, detalla Volkswagen de Brasil.
En seguridad, también fue uno de los primeros modelos de la marca producidos en Brasil en recibir controles de tracción y estabilidad.