Un integrante de la manada de Jaguar pasó por chequeos y sacó varias cosas en limpio. Se trata del Jaguar F-Pace que incorpora una merecida actualización de mitad de vida, a cinco años de su estreno global en el Salón de Frankfurt 2015. El SUV británico -originariamente obra del ingeniero Ian Callum- innova con un interior rediseñado, una cara frontal que también recibió retoques y una gama mecánica que se olvidó definitivamente de la tracción simple, las cajas manuales y que, por contrapartida, suma una variante híbrida enchufable de 404 caballos, que puede rodar más de 50 km en modalidad 100% eléctrica.
En concreto, el habitáculo del familiar inglés destaca un nuevo tablero cuyo cambio más notorio recae en la pantalla central que ahora es curva -de 11,4″- y va flotante sobre la estructura y no entramada como en el actual F-Pace. Según el comunicado de la integrante del Grupo JLR, el display es tres veces más brillante y 48% más grande que el anterior, además de facilitarse el acceso en un 90% a las tareas más comunes. Las actualizaciones del software son automáticas por aire (utilizando internet). El conductor dispone de toda la información relativa al manejo en una pantalla de 12,3 pulgadas y solo los mandos de la temperatura son con perillas análogas, ya que incluso las salidas de aire se controlan de manera táctil en la pantalla.
Respecto de la nueva palanca selectora de cambios, Jaguar dice que tiene las terminaciones y el agarre de una pelota de cricket. Todo muy inglés. Asimismo, para esta nueva entrega del Jaguar F-Pace, la marca se centró en eliminar todo aquello que tuviera aspecto de plástico duro, algo no propio del segmento de alta gama donde se estaciona.
Por fuera, las luces principales LED adoptan la figura que la firma llama ‘Double J’ que también podría llamarse doble L, a juzgar por la orientación. Por la retaguardia, el F-Pace 2021 se suma a la tendencia lumínica de su hermano eléctrico I-Pace.
Cambios bajo el capó
En materia mecánica, se elimina la tracción trasera y la transmisión manual, para dar paso a un renovado catálogo compuesto únicamente por el F-Pace de tracción total y de caja automática. En cuanto a motorizaciones, hay dos en diésel: 2.0 litros turbo de cuatro cilindros y 3.0 litros turbo de seis cilindros en línea. Mientras el primero es híbrido suave y se encuentra en dos potencias, de 163 y 204 Hp, el motor más grande podrá o no tener la ayuda de un pack eléctrico de 48V, aunque en ambos casos dispone de 300 caballos, diferenciándose solo en el consumo y las emisiones.
Por el lado de la gama bencinera, también hay dos propulsores turbo: un 2.0 de cuatro cilindros y un 3.0 de seis cilindros en línea. La opción de acceso utiliza el primer motor y rinde 250 caballos, más arriba el motor 3.0 litros también emplea la tecnología de hibridación suave y se halla en potencias de 340 y 400 HP, en tanto que el tope de gama -el F-Pace híbrido enchufable- vuelve a utilizar el motor más pequeño pero acompañado de un propulsor eléctrico de 142 Hp. Así, sumando ambas fuerzas, el F-Pace más encumbrado pone en la calle 404 caballos. Esta unidad puede rodar 53 km en modo eléctrico y su batería puede cargarse en el mejor de los casos en 30 minutos hasta un 80%.
La marca indica que el nuevo Jaguar F-Pace llega al mercado europeo a contar del último trimestre de año.